Durante una buena parte de su carrera literaria, Polifem Asmadelanov se dedicó a la ficción, cosechando un buen número de críticas positivas en las principales revistas del país. Una trayectoria que prometía, alguna vez, llevarle a disfrutar de las mieles del éxito también económicamente. Cuando apareció su novela 'Tremenda', muchos consideraron que había alcanzado su madurez y que esta obra, ambientada en un suburbio de Krasnoyarsk, le colocaría entre las grandes plumas europeas. Polifem Asmadelanov sin embargo, creía que su camino era otro. Harto de esperar a que las editoriales hiciesen de él esa figura mediática que anhelaba ser, no pudo esperar y preparó un libro titulado 'La solución', en el que se postulaba con una serie de recetas políticas de pan mascado destinada a salvar a Rusia de todos los males que le han acechado desde tiempo inmemorial. Paradójicamente, lo que muchos vaticinaron como un desastre editorial, fue el aldabonazo que necesitaba, aunque las críticas literarias fueron espantosas. Convertido en un personaje polémico y asiduo comentarista de cualquier cosa, ha escrito tres libros más titulados 'Yo, salvador', 'El problema de Rusia', 'Dadme 100 días y un Ejército' que han arrasado. Hacer no hace nada, pero nos tiene entretenidos.
Quisiera anunciarles que el próximo mes de julio presentaré mi nueva novela, que llevará por título 'Poesías carteables', del que quisiera también presentarles un pequeño estracto en un acto que se celebrará en el bar musical Elandro's, en el que algunos de mis amigos interpretarán diversos pasajes de la obra y nos lo pasaremos muy bien, porque también vendrán unos primos que quisiera que conocieran porque son una gente estupenda y quisiera también que probaran unas pastas que hace mi tía Maricarmen que son muy buenas y que las hace con una masa a la que le pone unas limaduras de nosequé y que se empeña en traernos una vez al año, cuando baja al pueblo, y nosotros le decimos que no, que traiga más, y ella que es que esas pastas son de una época concreta. Y quisiera que me escucharan tocar la guitarra durante la presentación. Ya me sé el rancho grande y ahora me estoy aprendiendo Sweet child of mine, de los Guns and Roses, que no me gusta, pero dicen que... que vengan.
El ínclito Benedicto Saraband ha presentado una obra que está dando mucho que hablar en los cenáculos literarios de la capital por lo polémico de su contenido. La obra, un Thriller político se llama 'Se te está poniendo cara de Técnico de Bienestar Social' y se enmarca en una serie de luchas de intereses y de personas que se ven obligadas a elegir entre la devoción y la vocación, entre lo que se pregona y lo que se hace, resultando una especie de cosa ya vista y que nos remite a otras obras suyas como 'Esperando una llamada', 'Organizando actos' y 'Escribiendo y golpeando', todas más o menos con el mismo contenido, pero cambiando nombres y ciudades. Lo polémico de esta nueva obra de Saraband tiene que ver con el contenido, hemos dicho, ya que toda la obra está en cursiva. Resultando que el lector piensa que está ante algo especial y viene a ser lo de siempre. Es un truco, y no vamos a entrar a valorar mucho más. Deudald Naismit ha publicado una crítica en el 'Younger Letters' que viene a decir que se cansa uno de soplapolleces pero que, a ver, es lo que hay y todos tenemos derecho a vivir.
Anastasio Orowich ha declarado su firme intención de representar su obra 'Estratos y Cúmulos' en el Odeón de nuestra ciudad. De nada ha servido la carta que el consistorio ha enviado al autor para que depusiera su actitud. De nada ha servido el comunicado de la Asociación de Escritores local, pidiéndole que no hiciera lo que se proponía. De nada ha servido que un equipo de la policía local haya actuado de incógnito, en una misión ciertamente arriesgada, intentando sustraer el libreto de la obra en el propio domicilio de Orowich. De nada ha servido que el Teatro local se haya declarado en obras y que un equipo de operarios de la grúa municipal haya causado graves desperfectos en el recinto completamente a cosa hecha. Finalmente, el día 23 de abril, fiesta de San Jorge, Estratos y Cúmulos se representará y ya están los folletos y los dípticos, que vienen a ser lo mismo, impresos. No ha habido manera.
Quelita Yánukovich ya ha finalizado, tras cuarenta largos años de estudio, su obra sobre la obra de Joaquín Obrámovich, el famoso poeta santafesino, oriundo de la Galitzia austrohúngara, que publicó en vida tres breves poemarios y trabajó mayormente como distribuidor de la casa Geiser de bebidas gaseosas. Sin embargo, Quelita Yánukovich, ha llevado a cabo un estudio minucioso de esos tres poemarios que abarca nada menos que 18 volúmenes. No sabemos si recomendar su lectura o no. Si van buscando a Obrámovich igual lo encuentran. Si van buscando desde una reflexión sobre el paso del tiempo, el aburrimiento de la vida en provincias, un compendio de recetas, diátribas sobre la situación política local y mundial, encuentros y desencuentros amorosos de la propia Yanúkovich, ya les decimos desde aquí que tienen para darse el gusto.
Llegó un momento en el que el autor comenzó a declarar que sus referentes a la hora de escribir la novela que presentaba eran Tal y Cual, que la ingente obra de Pascual no había sido suficientemente reconocida, que por el contrario Fulano era un gran talento que ya había publicado mucha obra y se situaba como una gran influencia, que Ella había escrito una novela muy afamada que también le había conmovido en su momento. Citó a literatos locales, a personajes de su entorno, a amigos, compañeros de batallas varias, poetas, ensayistas... y de mí no dijo nada. Y me veía, porque estaba casi siempre en su línea de visión, que ya me ocupé yo de...
Ud ha sido ruso en otra vida.
ResponderEliminarQué es eso de la Galicia austrohúngara...?
No le dio tiempo, pero si le dan media hora más seguro que sí que dice algo.
ResponderEliminarFeliz tarde
Bisous