lunes, 2 de junio de 2014

Moneda de cinco pesetas

En las monedas de cinco pesetas. Un duro. Una cara. Ahora se hace patente que se necesita un cambio. Un cambio en la cara de la moneda. Las monedas ya no llevan la cara del Rey. El Rey. Escritura automática. Nosotros agotamos los modelos, necesitábamos un cambio, un giro, un golpe de timón. Los opinadores nos van a ir haciendo digerible y explicable que, si, que la principal institución del Estado necesitaba savia nueva y que, ahora, se ha tomado la decisión correcta. Por norma general, en este país se toman siempre las decisiones correctas. Se toman las decisiones y todo el mundo considera que son correctas. Un señor que está mayor y que detenta el más alto puesto institucional del Estado porque así lo quiere Dios, la Constitución y nuestra voluntad de no querer otra cosa. Juro por Dios y por los Santos Evangelios. La idea del rey no era el continuismo. En el anterior Régimen. El Rey se va. Este señor al que denominamos Rey se va, o le han dicho que se vaya ya, o se ha tomado el acuerdo de que se aparte porque se necesita a alguien joven y dinámico que pueda salir en la tele todo el rato sin que la gente se muera de risa.
Necesitamos caras nuevas, gente que venda, el Rey ya no es tan guapo y tan alto como antes. Necesitamos que haya una cara nueva, no vaya a ser que tengamos que enfrentarnos a otra cosa. Ahora, no sé por dónde íbamos, su Majestad cede el paso a otra persona, que es su hijo. Con este perfil. Con este curriculum. Su hijo. El hijo, no la hija mayor, el hijo. No otra persona que hayamos decidido que... no, su hijo.
Vamos a leerlo otra vez. Ay, ya lo han dicho, republicano juancarlista. Todo va bien, todo nos va bien. Es maravilloso. Pese a todo, el Rey pasa a la historia como la persona que trajo la Libertad. Ojo.
Vamos a leerlo otra vez. El Rey, una persona que se llama Juan Carlos, máxima autoridad del Estado, decide que lo deja y entonces hacemos una ley para que sea el hijo el que le suceda en el cargo. Es lo más normal del mundo. Es algo que es así.
Moneda de cinco pesetas. El rey de España. Casi nada. Ya no irá el presidente del gobierno sólo al Mundial, ya no tendremos esa angustia sobre si le dará la copa éste o aquel al que gane la liga de baloncesto. El rey de España. El rey de España inaugurando hospitales. El rey de España recibiendo los halagos y parabienes de la masa que ve, al fin, encarnadas en una figura joven y preparada, la esperanza de un porvenir mejor. Felipe. Felipe como el nuevo nombre de moda. Felipe. Pablo. Felipe. Pablo. La gran esperanza de un porvenir mejor. Felipe entrando en el palacio de Marivent y la gente apiñándose para aplaudir a rabiar. Letizia majestuosa, con personalidad, preparada, siempre atenta, una mujer para un Rey. El rey de España. No hay nada más bonito en el mundo. Se están preparando los mecanismos para que todo sea fluido y nadie se entere. Que nadie se alarme. Se mantiene la agenda. Se mantiene todo.
Felipe abrirá una nueva esperanza de paz y concordia y de cenas de nochebuena esperando a ver qué dirá el nuevo amo. Amito. Qué quieres. Amito. Lo que gustes. Amito, qué guapo con barba. Amito. Qué guapo sin barba. Hoy el rey no tiene agenda. Como yo.
Monedas de cinco pesetas. Es hora de un nuevo consenso, de una nueva alianza de los españoles en torno a la figura del nuevo monarca. Olvidemos el pasado, encaremos el futuro. Peladillas en las comuniones. Este nuevo tiempo de transición que debe servir para forjar esa unión entre todos.
Me estoy empezando a encontrar realmente mal. No tengo ninguna bandera republicana en casa para sacar al balcón. Asómate morena.
Concordia, orden, savia nueva, el nuevo felipismo.
Viva la República.

4 comentarios:

  1. En serioooo???? Ay, que no me entero!! Voy a leer las noticias! Gracias.

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  2. Uff, yo lo hubiera dejado antes, menuda tabarra de trabajo y todo el mundo criticando. Es que, las hijas la han cagao pero bien con esos maromos... Pues no sé qué es peor, que se quede España en manos sólo de los políticos. No es por nada, pero es que, los políticos españoles no hablan ni inglés...Por lo menos la realeza se gastó el dinero -entre otras cosas- en una buena educación.

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  3. Y qué van a hacer con todos los euros con la cara de Juancar?
    Y en El Jueves a quién van a llamar campechano ahora?

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    1. campechano como este, pocos. el otro día contaban en la tele anécdotas divertidas del rey en los restaurantes que frecuentaba. en uno de ellos, (ay que risa), contaban como viendo pasar delante de él una bandeja de huevos fritos con patatas, le dijo al camarero 'eh, tú, trae para aquí esa bandeja o te parto un brazo'. y eso. campechano sólo va a ser otro.
      pero no se preocupe, el nuevo, además de preparado también han deslizado que es... campechano. glups.

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