martes, 2 de abril de 2024
Américo Vespucio. Relato de un error histórico - Stefan Zweig
Es muy sencillo. Lo dice la contratapa y lo dice el propio Zweig en la parte final de este librito la mar de interesante. Es un resumen que vale para este caso pero vale para todo. Y uno cree que quizás se ha utilizado toda la historia por parte de Zweig para llegar a la parte final y decir esto. En ocasiones, en muchas ocasiones, es más importante aquel que cuenta un hecho que el que ha protagonizado el hecho en sí. El caso de Américo Vespucio. Cristóbal Colon 'descubre' un territorio nuevo, pero él no lo sabía y se murió sin reconocerlo. Él creyó que estaba en la India. Sin embargo, el primero en saber reconocer que lo que se acaba de 'descubrir' no era tierra conocida sino desconocida, fue Américo Vespucio. Y Vespucio no era nadie. Era un simple piloto de uno de los barcos que intentó reconocer esa tierra nueva y que, efectivamente, supo ver y supo escribir, sobre todo, que era un mundo nuevo. Más allá de la idoneidad del verbo 'descubrir', del papel de esos navegantes y descubridores y su legado, o de cómo pudo ser que un personaje en principio sin la envergadura de otros marineros, etc., pudo darle el nombre a un continente, de lo que se trata aquí es de reconocer que un hecho en sí, puede no tener importancia si uno no lo cuenta. Emisor, receptor, mensaje. Saber contar es más importante que hacer. Una vez más.
viernes, 18 de noviembre de 2022
Twitter is dead
¿Y ahora, cuando me levante por la mañana y emplee esos diez o quince minutos sentadito en el tal mirando el móvil a qué me voy a dedicar? La pronosticada para hoy mismo, o quizás para mañana, muerte de Twitter puede ser uno de los cambios de paradigma más importantes que uno recuerda haber vivido. De repente, una fuente de información y de difusión de contenido más accesibles de la historia, se puede ir al garete. Desde que el multimillonario Elon Musk, cuyos millones vienen por herencia y amasados durante el Apartheid surafricano, decidió comprar Twitter como un capricho más de ser humano desahogado, todo parece ir para atrás. Comenzó echando a la mitad de la plantilla y ahora, después de haber exigido que los trabajadores se empleasen como robots esclavos, éstos han decidido dar la patada y largarse. La huida de cientos de trabajadores se supone que puede provocar el colapso de la compañía. Es ciertamente elogioso que esta gente haya decidido mandar a la mierda directamente al multimillonario presuntuoso. Asustado, el millonario presuntuoso ha decidido cerrar las oficinas no vaya a ser que pase algo. Pero la amenaza de que esto puede hundirse, tiene a la gente revuelta.
Twitter se ha convertido en una herramienta utilísima si quieres conocer a la parte de la población que tiene algo que decir. Normalmente esto se emplea para calificar a la gente cualifiacada que tiene 'algo' que decir, pero aquí uno encuentra a la gente que tiene algo que decir sea eso lo que sea. Especialmente especiales son aquellos que desprecian a la gente, desprecian al que pierde el tiempo en redes sin pasar a la acción, desprecian, desprecian, desprecian, desprecian, pero nos cuentan su vida, sus desayunos, la cerveza que están probando, el lugar donde pasan el fin de semana, lo que dicen los papás en el grupo del colegio de wasap, piden consejo sobre películas... pero ojo, puaj todo. También mención especial para quien ha hecho carrera política en Twitter a base de proclamas incendiarias, frases ingeniosas, juegos de palabras, autopromoción irresistible, que sin esta red quizás se enfrenten a algo así como la realidad de lo tangible. Quizás ya sea tarde, no para ellos, sino para los que ya nos hemos acostumbrado a una manera de recibir la información fragmentada, cortita y al pie, sin reflexión, buenos y malos, conmigo o contra mí.
La política en Twitter. He de decir que soy bastante paquete en esto. Mis tweets jamás han alcanzado gran repercusión, no soy muy ingenioso, me esfuerzo mucho, pero no me sale. Siempre encuentro que los demás lo hacen mucho mejor. El tweet serio, el tweet afilado, el hilo currado, no me salen. Mis habilidades son otras, pero no está lo de hacer promoción de lo mío en Twitter. Mis habilidades son otras. Digo. Frases hechas, fotos melodramáticas, fotos mirando al horizonte, fotos posando con un micrófono, fotos rodeado de personas importantes, la frase justa, el tweet fijado.
He tenido algunos piques, pocos y hace tiempo, ya hace mucho que ni me engancho y que nadie, tampoco, me busca. Pero qué excitación. Hemos aprendido a no darnos publicidad unos a otros intentando nosequé. Twitter como herramienta de escape, en conversaciones que no, o en actividades que tampoco, el recurso del móvil y del Twitter como válvula de escape. A ti también te pasa.
¿Qué pasará si se cae twitter? Buena parte de mi manera de informarme pasa por aquí. Ni la radio, ni la prensa. Es esta red. Me informo y también me formo una opinión. De hecho, muchas veces prefiero difundir la opinión de otros que la propia. Qué cosas. Todo eso dicen que se puede acabar en cualquier momento. Hoy, o mañana. ¿Dónde os vais a ir? ¿A qué dedico el tiempo libre?
viernes, 23 de abril de 2021
¿Qué hacer?
¿Tú qué hubieras hecho? ¿Te hubieras levantado y hubieras abandonado el debate? No lo sé. Supongo que no. No lo sé. Ante la situación en la cual la política de la extrema derecha te dice que te largues, que sobras, que te pires, que ojalá te vayas para siempre... ¿había que irse? La opción que nos dice la gente que sabe es que con la extrema derecha no se discute, no se argumenta, no se debate. Tienen toda la razón. Pero, ¿te tienes que ir cuando te dicen que te pires? No sé. Yo no lo sé. Supongo que uno espera que cuando esto pasa, el resto de candidatos de más o menos tu mismo espacio, se levanten y se vayan contigo y no se queden allí lanzando duras condenas y pretendiendo convencer a la facha de que su comportamiento es incorrecto. Ya lo sabe. Ya lo saben y van a eso.
La actitud de la extrema derecha y también del PP de Madrid, como representantes de la extrema derecha mayoritaria, nos está enseñando una puerta que pensábamos que no se podría abrir nunca. Un agujero. Nos quejamos de la democracia, de lo imperfecta que es, de lo arbitraria que es la justicia que es capaz de mandar al talego a gente que no hace más que decir cosas, a veces barbaridades, que es todo fatal y todo mal. Pero todavía podemos ir a un sitio y no irnos si no nos da la gana. Que nadie nos eche de un lugar, de un espacio. Ni por dignidad ni por hostias. La actitud es no darles bola, no darles carrete, la actitud correcta es no amplificar su discurso. Estoy de acuerdo. Pero una vez que estás allí y estás seguro de que tus supuestos compañeros no te van a seguir y no va a haber solidaridad, no te vayas. Quédate. Porque es lo que les jode. Que estemos. Es lo que verdaderamente quieren, que nos piremos, que solo se escuche su discurso.
¿De qué nos sirve que la gente escuche sus mierdas sin que se les argumente nada en contra? ¿Les importa una mierda lo que digamos? Pero ¿y si se quedan solos la gente, el común de los mortales qué entiende? ¿Cuánta gente no pensará hoy que la facha ha echado a Pablo Iglesias? ¿Acaso no dijo Ayuso cuando se presentó Iglesias que España le debía una por haberlo quitado del gobierno? ¿No lo venderán como un triunfo el hecho de que no haya debates y que la gente no tenga que escucharnos? Cada vez estoy más perplejo por cómo se nos cuela por todas partes y cada vez estoy más perplejo por la respuesta de los medios.
Los medios de comunicación y en concreto la Cadena Ser. No entraré en la actitud de Angels Barceló, que supongo que ha hecho lo que se supone que debe hacer una periodista de los años 80. Consenso, demócratas, la palabra, la democracia, el derecho. Entraré en la cantidad de mierda que se ha vertido una vez que ha pasado el debate, una vez que alguien les ha dicho a Gabilondo y a Mónica Martínez que debían largarse de ahí inmediatamente. Al final de todo, cuando ya ha acabado el debate y ha empezado la valoración de los periodistas. Y lo que se ha escuchado ha sido lo que me da miedo de verdad. Porque la maquinaria ha comenzado a funcionar, en la SER, y se ha dictaminado que Pablo Iglesias tenía todo esto preparado y que le ha servido para. Así de sencillo. Uno tras otro, los comentaristas de la SER han ido destripando a Pablo Iglesias. Incluso se han permitido interrumpir el debate post para entrevistar... a Monasterio otra vez.
Los medios de comunicación. Los periodistas, yo el primero, no existimos. Somos, sobre todo si se hace información política, extensiones de los partidos políticos. Nada más. No somos medios, somos boletines del partido. Y así han actuado los comentaristas. Como hooligans de un sistema que quiere ver a Pablo Iglesias, a Unidas Podemos, fuera del tablero. Fuera de circulación. Ha sido tan infame que casi he olvidado lo infame del debate con Monasterio. Y he pensado, la Ser, mi madre escucha la Ser, cuánta gente de izquierdas sigue escuchando la Ser. Qué se habrá oído en Onda Cero, en la Cope, en esas emisoras.
No sé. Ya han dicho que no va a haber más debates. Lo han conseguido. Que nadie diga nada. Que solo ellos aparezcan. Incluso nosotros hacemos vídeos en los que les dejamos que suelten sus mierdas y nosotros nos conformamos con mostrarlas, como si solo eso bastara. La gente querrá oír otras cosas, digo yo. Los fachas ya sabemos que son fachas, ellos ya lo saben, no necesitamos escuchar su voz, necesitamos escuchar la nuestra.
Algún mensaje de esperanza. Que el 4 de mayo la gente va a salir de debajo de las piedras para parar a esta amenaza. Ayuso y Monasterio. La extrema derecha que se ríe mientras te cabreas, mientras te desesperas. Que no necesita argumentar, que solo se ríe y te deja que te soliviantes. Hay que votar hasta aburrirse.
miércoles, 1 de julio de 2020
No se entiende
El contenido suele ser forzado. El contenido es forzado e improvisado. El contenido suele partir de un punto concreto para perderse por la inmensidad como se pierden las palabras que dices cuando estás hablando con esa vehemencia que parece querer imponerse al silencio y solo hace que engordar aún más la sensación de inutilidad. Las palabras y los contenidos que se enmascaran debajo de historias de un cierto interés, las palabras y los contenidos que no casan con lo que uno espera que sea lo que hay que leer en un blog local. Local como vinculado al territorio. Soy una persona, y ahora quiero hablar también un poco de mí, vinculada paradójicamente a mi tierra. Digo que paradójicamente porque la verdad es que uno no tiene una relación evidente con la tierra. No me gusta la tierra. La tierra que uno pisa, el mundo en el que uno vive. El aire que respiro cada día. Esa es mi tierra y ese es mi mundo. Y estas con mis cosas. Cosas que colgando parecen bolsas. Hoy es un día como otro cualquiera para hablar del fondo y de la forma. Del contenido especialmente. Qué es lo que no se entiende, qué es lo que tendría que decir, qué es lo que se espera de mí, Señor, si me pones estas pruebas tan difíciles. Si ahora me tengo que complicar la vida con el siginificado y el significante, entonces qué. Si en este preciso momento de mi producción literaria he de replantear desde el principio lo relativo a la forma y el contenido y sobre todo al contenido entonces qué. Y ese es el planteamiento que me gustaría dejar más o menos claro, que es lo que es. Es lo que uno dice y cómo lo dice lo que le imprime carácter y condición a todos y cada uno de los escritos y pienso, me lo creo realmente, que todos los textos se entienden de la misma manera, todos quieren decir exactamente lo mismo y absolutamente todos tienen la misma intención. La intención, creo que esto ya ha quedado claro en otras ocasiones, no es otra que la de rellenar, la de ir completando cada día una tarea que no es titánica ni deja de serlo pero que sí que es lo suficientemente apasionante como para cualquier otra cosa. La tarea es titánica. Titánica. Ustedes no me conocen, ustedes físicamente no me conocen, si me conocen saben que la palabra titánica no se corresponde en absoluto con mi propia imagen. Propia imagen. Y de qué sirve escribir tanto, tan seguido, si no te entienden. De qué sirve la propia imagen de persona que escribe tanto si todo consiste en que no te entiendan. Qué es lo que podemos decir. Qué oscura satisfacción debe encontrar uno dentro de sí mismo a la hora de escribir cuando le dicen que no se entiende. No se entiende. Se entiende. Se entiende perfectamente, se entiende de una manera clara, prístina. Se entiende como se entienden todas las cosas, que están delante de uno y que no tienen otro camino que el de seguir las normas de la comunicación.
Siempre. Emisor, receptor, mensaje. El mensaje creo que es ciertamente evidente, claro, totalmente inteligible. El mensaje está compuesto por un código, el mensaje y el significado y el significante. No sé porqué he puesto lo del código.
Y ahora hemos tocado con la línea de fondo del problema. 'El mensaje está compuesto por el código'. Qué querrá decir eso exactamente.
lunes, 4 de mayo de 2020
Confinamiento #37. Adiós #Rockdelux
Rockdelux es una revista en principio musical, pero cuyas prescripciones llegaban al cine, la literatura, las series, los cómics y todo aquello que te hiciera sentir bien. Bien pensando, bailando, escuchando, hojeando, descubriendo, ampliando la mente, reafirmándote en tus prejuicios... Rockdelux es esa revista que, aunque hiciera tiempo que no la compraras (quizás deberíamos haberla comprado más), siempre había un click en la cabeza que, debido a la perenne vida bibliotecaria a la que me he visto condenado tanto tiempo, te recordaba que 'quizás haya salido el Rockdelux). El ritual siempre era el mismo. Primero, ver las reediciones de discos antiguos, luego quizás las críticas de discos por si reconocías alguna banda, ir al apartado de revisión y diseccionar las entrevistas a las bandas siempre con este pensamiento en la cabeza: me caen mal todos.
Rockdelux no era una revista de rock, de pop, de música especializada en un género, podía salir desde el punkarrismo a la ñoñez, desde el afectado clasemedianismo de pop barbudo y triste hasta la devoción por los raperos y la música electrónica y lo más así que tú pudieras sentir como ajeno. Cuando ellos dijeron que Rosalía molaba yo pensé que qué pollas decían. Ahora a todos nos gusta Rosalía. Y así con muchos y muchas cosas más.
Quizás mi momento de máxima pasión con Rockdelux fue con la edición de su Especial 200. La Biblia, sin duda, de la música. Los 200 mejores discos de rock, pop, soul, jazz, etc. El número 1 el del plátano de la Velvet y luego... Todo. La Biblia. Cuántas veces habré ido al lavabo con esa revista, cuántos repasos, cuántas consultas. Reciéntemente lo volví a mirar para ver qué decían sobre My Bloody Valentine. Aquel número, le dí mil vueltas, creo que se lo llegué a dejar al Abel. Le sigo dando mil vueltas. Tengo el de lo mejor de la década de los 2000, el de los mejores discos españoles (la otra Biblia sin duda), hasta el último que sacaron en noviembre de resumen de la pasada década.
O aquellos cds que editaban con recopilaciones de sellos, impagables y que todavía conservo, o aquellos 'lo mejor del año', donde siempre pensábamos lo mismo 'no conocemos a la mitad' y cada vez conocíamos a menos hasta ahora donde ya no sabemos qué es qué. Destacar aquel cd de la Trojan que hizo Ibon Errazkin y que fue otra epifanía. Y, otra vez, aquel concierto de la Rockdelux Experience que editaron en cd y que, bufff. Del 2002. Hace 18 años ya. Qué viejos.
Su criterio no coincide con el mío. O coincide en que no coincide. En Rockdelux siempre han sido modernos. Modernos a veces en el sentido más caricaturesco del término para quien ha querido ser moderno pero no ha podido serlo nunca del todo. Tuve mi momento. Pero ahora ya no. Ahora soy un cuarentón que ha perdido la vergüenza de decir que le gusta tal o cual grupo gracias quizás a que en Rockdelux aprendí a verle las virtudes a cosas que yo detestaba.
Yo soy periodista, estudié para ello pero ya saben que nunca me creo capacitado para. Muchas veces habré soñado (es una manera de hablar...) con que el cenit de un periodista al que le gusta la música, el cine y todo eso que ya sabemos todos, debía ser escribir en Rockdelux. Nunca se me pasó por la cabeza ni intentar enviar nada. Jamás. Dónde iba yo. Los que escribían eran dioses y diosas. Incluso cuando los conocía y las conocía personalmente. El hecho de escribir en Rockdelux justificaba que.
Hay más revistas. Mondosonoro, Ruta 66,... no sé cómo aguantarán.
En este último número, claman contra el amateurismo, el voluntarismo y abogan por la profesionalidad del periodismo. Que lo digital nos lleva a la precarización constante y un par de páginas más allá se despiden con un 'venceremos'. Ellos lo han intentado.
Como muestra de qué iba la revista y a lo que aspiraba, en este último número han pedido a sus colaboradores (sin avisarles de que iba a ser el último número), que hicieran sugerencias para el confinamiento. En definitiva, lo de siempre. Qué es lo que puede molar, qué es lo que nos llega a la patata, qué puede hacernos sentir bien.
Hoy, nos hemos juntado mi hermano y yo para comprar el último número en el kiosco de la Avenida Santa Coloma y hemos comprado otro más para el Abel que no está aquí y le hemos quitado el último a un chaval que también venía a por él.
Es la hora de agradecer a Rockdelux y quienes lo han conducido hasta ahora por habernos descubierto bandas, grupos, solistas, habernos confirmado lo que ya sabíamos, habernos dado una rabia infinita, habernos enseñado esas fotos tan afectadas de grupos tan repelentes, por habernos recuperado artistas que creíamos estigmatizados, por habernos, en definitiva, entretenido, informado y abierto la mente.
Un día triste para el periodismo, pero un día definitivamente triste para la cultura en general.
viernes, 24 de enero de 2020
Día internacional del periodista
Emisor, mensaje, receptor. El miedo es el mensaje. El medio es un masaje. Todo el rato haciendo bromas sobre el tema, porque realmente hay poco que contar respecto al periodismo. El periodismo es un oficio, sí señor y sí señora. Un oficio, un oficio que se aprende con el tiempo y el tiempo es infinito, así que el periodismo nunca se acaba de aprender del todo. Puede que esté diciendo frases de libros o de personas con la chaquetilla esa, el chalequillo ese lleno de bolsillos para meter cosas, o periodistas con sombrero y fumando delante de la máquina de escribir. Amo esta profesión y la odio al mismo tiempo y me bebo un sorbito de bourbon para ir pasando la vida. Vendido.
Vendido al capital contando cosas que son sabidas por unos pocos y que el resto del mundo van a conocer porque tú se las estás contando tal que así, ahora mismo, mira, esto es lo que está ocurriendo. El periodismo, historias personales, cuéntenos lo que usted está haciendo, cómo es la vida, qué rica, qué variada y qué diversa, la vida de la gente común, puse una tienda aquí hace 40 años y ahora hago lo mismo pero mejor y yo me fui a estudiar a Alemania y ahora me han dado una beca para hacer nosequé y yo me vine del pueblo porque allí no había nada y ahora estoy muy contento aquí porque aquí me casé y encontré algo que allí no tenía y no he vuelto nunca más. Historias personales. El ritmo de la calle, la vida, el latido de la ciudad, estar en contacto con la realidad.
Es usted un narrador nato.
Tiene usted una magia especial para contar lo que sucede.
Está usted siempre al tanto de lo que ocurre.
Interpreta usted las señales como pocos.
Me parece estupendo que el periodismo continúe siendo una profesión y que personas jóvenes alberguen la esperanza de cambiar el mundo gracias a su trabajo en un medio de comunicación de masas.
Medios de comunicación de masas. Teoría de la comunicación.
Que te quede claro, amigo lector, que el esquema es siempre el mismo:
Emisor, mensaje, receptor.
Y tú, usted, yo, nosotros, somos siempre receptores. Y que yo no estoy emitiendo nada, porque no hay mensaje.
Ruido.
miércoles, 6 de noviembre de 2019
Sin guión
Marc Giró es un periodista que a veces salía en tv3 y otras en el Versió Rac 1 haciendo unas intervenciones que uno no sabía bien bien cómo catalogar. Histriónico, podríamos decir. Cuando anunciaron que Marc Giró se quedaba con el programa pensé, qué bajón.
Y no.
Resulta que Marc Giró hace un programa de radio que durante una hora, se convierte en un foco de caos sin ton ni son, una cosa en la que se grita, se chilla, se interrumpe, se declara aburrimiento por cómo está todo, se ríe, se toma uno lo más serio a chufla y sobre todo, parece que nadie se ha preparado nada aunque naturalmente haya secciones, entrevistas, gente anunciando libros, actos, etc. Y todo importa bastante poco. Y Marc Giró no se esconde y dice sin filtro lo que le va pasando por la cabeza y si se tiene que comentar un tema como el cuestionamiento de la sexualidad de nosequé fenómeno pues se interviene de manera sencilla y llana y se explica y luego se suelta una cafrada y venga palante. Y si hay público que no se entera pues se dice. Y si hay fútbol por la tarde que le den por el culo al fútbol por la tarde y al deporte en general.
Así, sí que me gusta la radio. Que en general me gusta la radio, pero un programa así, que no quiera salvar el mundo desde las ondas, que no quiera tratar temas 'que nadie trata porque nosotros vamos a presentar la cara oscura de la sociedad', que no va de cagarse en España cada dos por tres, que no va de hablar de fútbol, que no va de promocionar las cosas y los libros y los discos de la casa y los artistas tan buenos y tan majos y tan implicados, ni hablar de esos restaurantes tan así donde comes tú y tus colegas, o recomendando escapadas para el fin de semana, o ese concierto y ese festival tan así, o todas esas cosas que uno ya tiene las oídos que le hacen dolor de verdad de escucharlas.
A la mierda todo.
Ese programa de radio con Marc Giró chillando y metiendo prisa a la gente que se está enrollando, y si había guión qué disimulado que está.
Sin guión es como me ha gustado a mí siempre. Sin guión. Sin preparar, sin mirarlo. Tanto rollo y tanta hostia ya.
viernes, 25 de enero de 2019
Día del Periodismo / Día de la Publicidad
Desde entonces cada vez que alguien me pregunta que soy y tengo que contestar eso de 'periodista', me da un poco la risa. O otra cosa.
Día del periodismo.
Trabajé durante diez años, creo, puede que fueran menos, en una empresa de publicidad. La serie B de la publicidad. Veo los twits de la peña diciendo cosas como que hoy es el día en el que te acuerdas del copy o de... la serie B de la publicidad no tiene esas cosas tan glamurosas. Las agencias de publicidad de la serie B tienen comerciales que desayunan como si estuvieran en su propia casa, tiene personajes gloriosos, otros siniestros, las páginas en los diarios, la media página, el modulo. El modulito.
Antes, mucho antes, esta profesión era una profesión de prestigio. Como eres periodista, no eres un trabajador, viene a ser la broma. Ser periodista antes era como ser el médico del pueblo, el maestro, el cronista local. Ahora qué es ser periodista, un lamento por lo que tú pensabas que ibas a ser y no sabes hacer.
Para ser periodista, como ocurre cada año que es al día del periodista o de la publicidad, hay que valer, tener unas características de carácter definidas al margen de que te guste escribir o no o hablar o no o proyectar con imágenes o no. Tienes que tener algo, un carácter, un ansia, una disposición. Algo.
Como siempre, ese no soy yo.
Día del periodista. Cómo estarán mis compañeros de la facultad. Cómo habrán acabado. Dónde estarán trabajando. Serán periodistas o qué serán. Con algunos tengo contacto. El facebook y esas cosas. A otros me los he ido encontrando. Cómo estarán mis compañeros y compañeras del Coloma Sports, de Telepolis, de DobleZeta... hoy es el cumpleaños de la Cristina, no le he dicho nada.
La Sabina, la Oti, el Joan, el Jordiet, la Crais, a algunos y algunas les veo el careto por el facebook.
Periodista. Redaction man, redaction woman.
Todos los años hablando de un gremio que no es lo que fue. Que no es nada.
Textos, comunicación, emisor, mensaje, receptor. La marca és molt important per identificar el nostre producte.
Y así vamos. Hasta el año que viene.
lunes, 9 de julio de 2018
Yo no sé mucho de política
Ayer entrevistaron a Valtonyc en TV3. Es un personaje con el que tienes que simpatizar. Perseguido por el Estado, por una Justicia que pretende ejemplarizar con dureza a las masas. Muy siglo XIX.
Empieza la entrevista a Valtonyc. El escenario escogido es una exposición sobre el 1-O. Urnas con pelotas de goma, fotos del rey... Las urnas del 1-O. Es decir Valtonyc = 1 d'octubre. Muy sutil. Y comienza a hablar Valtonyc y la entrevistadora le va haciendo preguntas y el cantante las va respondiendo.
Y yo, que voté en el 1-O por que vi las imágenes de la poli repartiendo tortas, pero que no iba a votar porque no me creía ni me creo la movida que está detrás y se ha demostrado que esa movida para lo único que ha servido es para hacer de rampa de lanzamiento de una derecha populista catalana que a ver cómo la bajas del burro ahora, un burro que no es otro que seguir teniendo el poder y sus resortes sin mover un dedo, de repente empiezo a no simpatizar con Valtonyc.
Porque de repente, y tras pedir disculpas por haber cantado cosas machistas, violentas y demás, Valtonyc empieza a soltar toda una serie de tópicos y de lugares comunes y de soflamas y de identificación de amigos y aliados y de enemigos y demás que me hace sentirlo ajeno. Así de triste. Ajeno. Resulta que la solidaridad de los políticos que no son kosher no es nada más que postureo en un twitter. Que no es auténtica. Que solo Lluis Puig de Junts Pel Sí, ha demostrado ser un colega de verdad. Junts Pel Sí. Y no de ERC precisamente. Y resulta que carga contra Serrat y Sabina porque no han sido realmente solidarios y los compara con Loquillo. Y todos estamos de acuerdo con que Loquillo es lo peor porque simpatiza con Ciudadanos, claro. Pero es que es TV3 y si se habla de Loquillo debería tratarse con algo más de neutralidad porque Loquillo es catalán y aunque fuera de Sudán del Sur, debería tratarse como un ciudadano que puede pensar lo que quiera. Pero no. Solo hay solidaridad y buenas acciones por parte de unos. Unos que son todos lo mismo aunque unos sean de derechas y otros de izquierdas.
Y resulta que los políticos que están en el exilio están haciendo una tarea brutal, que es construir República. Y le han tratado muy bien. Y que la prensa española no vale para nada, porque la prensa extranjera es mejor, porque se sube en un taxi y le entienden perfectamente por lo que está pasando. Y el Estado español es fascista.
Y después de todo esto, antes de meterse en más jardines, dice que él no entiende mucho de política. Y ya acaba de indignarme. Y dejo de escuchar. Dejo de escuchar que él no entiende mucho de políticos, ni de política. Porque todo lo que ha estado hablando en la televisión pública durante un rato era sobre... qué.
Y yo no sé, en esa situación en la que la poli me busca o me piden cárcel las barbaridades que diría y a quién identificaría como mi amigo. No lo sé.
Una persona, un periodista, edita las cosas que escribe, cuando le interesa las pone, cuando no, no. Si encuentra a alguien que no tiene mucha idea de lo que le está preguntando, y no quiere hacer daño, lo edita. Cuando quiere hacer daño, lo deja, le da carrete, lo infla. Y puede incluso que editando, haga daño.
Y no tiene mucha idea de política, pero ha clasificado. Y parece que se le da la razón. Y qué testimonio de con quién nos identificamos y con quién no.
Y despiden la entrevista a Valtonyc, que dice que no piensa volver hasta que no haya República.
Y yo quiero que vuelva a su casa y que no vaya a la cárcel por cantar lo que le de la gana. Yo no quiero que nadie vaya a la cárcel por no tener ni idea de política. Ni siquiera los políticos que no tienen ni idea de política. Y compartiré las veces que haga falta los vídeos y los llamamientos para que sea libre. Me puede pasar a mí. Y no soy cantante.
Pero lo de no tener ni idea de política... cómo lo llamaba Paco Rabal, eso era... ser de derechas.
martes, 27 de febrero de 2018
Crónica del #Plegramenet de Febrero. Ven y sube a mi nube.
domingo, 19 de noviembre de 2017
El pasado no me interesa
Carlos Herrera es producto de otro tiempo. Como cuando José María García, y no los pongo la mismo nivel, quiso seguir haciendo radio o tele cuando ya su tiempo había pasado. Carlos Herrera hace un programa matinal en la Cope, donde pontifica sobre la actualidad y con ese tono de señorito cosmopolita pero llano pero señorito pero hombretón pero señorito pero que ha vivido en Barcelona pero señorito, va colando su tufillo reaccionario en cada comentario. Si una empresa privada quiere dejarse la pasta en esto, no seré yo quien lo discuta. Si esa empresa privada también se financia con mi pasta, lo discuto más.
A lo que voy, entre esos contertulios se encuentra Salvador Sostres, periodista muy catalán que representa la quintaesencia de la derecha catalana. Fascista, clasista y guarro. Puede ser la derecha de cualquier parte, al menos la extrema derecha. En un principio, cuando comenzaba, Sostres era muy convergente, muy de derechas y muy indepe a la vez. No sé si era indepe, así como es la gente ahora que sonríe tanto. Era un clasista. Era de los que se reían de los charnegos, de los andaluces, de los que eran pobres, de los que no eran como él y sus amigos. Ahora hay un personaje en la radio, el Nacho de Sanahuja que creo que lo imita. Creo que lo parodia. Salvador Sostres es infame, comentarios pedófilos, comentarios homófobos, comentarios que no hacen gracia porque no tratan de hacer humor, tratan de hacer daño a quien no piensa como esa clase de gente que no nos quiere conocer, que quiere que trabajemos para ellos pero que no nos acerquemos a sus casas. Y follarnos vivos a cada rato. Como el nota ese de Jordi Galves que ha escrito un artículo sobre Cornellà que da más asco que la ostia. Y qué grande el artículo de la Vasallo reivindicando ser de aquí y señalando a esa gente que se ríe tanto de nosotros por no ser como ellos.
Sostres, al final, escogió entre ser muy de derechas y ser... y eligió ser muy de derechas, una vez que esto del nacionalismo se ha contaminado con los hippies de la Cup, que le deben dar un asco atroz. Así, como otros en su momento, se alinea ahora con la derecha que quiere orden, por encima de todo.
Salvador Sostres fue reclutado hace poco, como digo, para el programa de Carlos Herrera. Hace poco significa que todo el mundo sabe quién es Salvador Sostres y dio igual. La Primera cadena tuvo el desagradable honor de tener a un apologeta del maltrato y la pedofilia en pantalla haciendo daño.
Las bajas audiencias, al parecer, han provocado que el propio Carlos Herrera, tan señorito, nos permita seguir viviendo y abandona el programa para seguir dando la brasa en la radio. Es decir, se acabó esa mierda. Hoy iban a hablar, como el que no habla de nada, si lo de la vacunación infantil es fetén.
La extraña manía de pensar que las cosas rancias y con tufo a rancio nos van a volver a gustar. La extraña percepción de que las cosas que huelen a nazi nos van a molar, porque no las entendemos o porque somos eso, jabón para uso humano. Se creen que somos jabón y que vamos a sonreír mientras el pijo de mierda de turno se bufa en nuestra cara. Nos escuchan, nos pasan la mano por el lomo, nos joden, es por nuestro bien.
Hoy, espero, que ya no emitan esa trufa de programa. Lo que no espero es que no sigan pensando que nos interesan las ferias y fiestas, que nos interesan los toros y las romerías, que nos interesan los bailes y cánticos regionales, que nos interesan los recios valores, que nos interesan las mujeres mujeres y los hombres hombres, que nos interesan los pueblos y sus gentes, que nos interesan los profesionales liberales, que nos interesa una puta mierda nada de lo que nos ofrecen en esas televisiones públicas que solo sirven para hablar del pasado. De sociedades arcádicas, donde todo el mundo (su puto mundo) es bueno y santo y habla bien y si habla mal nos reímos de ellos y les pasamos la mano por el lomo y les escupimos a la cara para que se limpien con el pañuelo que les damos.
No me interesa nada del pasado. Al menos de su pasado. No quiero que mi presente sea su pasado. No sé cómo decirlo más claro.
martes, 31 de octubre de 2017
El relato
El relato. El relat. Construir un relato. Una historia, un cuento. Armar una explicación. Es más antiguo que el mismo mundo. Lo que estás viendo no lo estás viendo como es. Es como yo te voy a decir que es. Es así. Te lo voy a contar.
Vivimos en tiempos en los que todo ha de ser interpretado por alguien. Pero no son tiempos tan distintos a todos los tiempos anteriores. Lo que pasa es que ahora tenemos mucha más necesidad de encontrar un camino. O no. Según lo que me digan y según el relato que me interese contar.
Puigdemont, que puede ser president de la Generalitat, President de la República, @Krls, o Carles Puigdemont según lo que nos interese, viaja a Bruselas. Al parecer parte de su equipo de gobierno no sabía lo que estaba pasando. Llega a Bruselas, se queda en Bruselas, acogido por un partido de extrema derecha, o invitado, según lo que nos interese incluir en el relato. Según lo que contemos decantaremos la balanza para un lado o para el otro lado. Se queda allí, pasa la noche, llega el día cuenta que se va a quedar en Bruselas pero que no pide asilo político, pero lo que hace es como si se exiliara. O no. Da igual.
Lo importante no es lo que pasa. Lo importante es que escuchemos se adapte a nuestro esquema. No estamos perdiendo, nada de lo que hacen nuestros representantes está mal, todo va bien, todo tiene un sentido que no sabemos interpretar al principio, pero que, efectivamente encaja al final en alguna parte. Es una decisión sabia, lo ha hecho genial, tenemos que seguir estando con él.
El 155 es lo peor que nos ha podido pasar, pero al mismo tiempo nos sirve para cargarnos las instituciones autonómicas y construir nuevas instituciones y si no tenemos ni una cosa ni la otra, es porque es bueno. Es bueno y está bien. Y será culpa de otro.
Elecciones en diciembre. Es fatal, nos están imponiendo unas elecciones, es como si te obligaran a ser demócrata a su manera, no puede ser, no puede ser que seas tan vendido y tan rastrero como para plantearte participar en estas elecciones, con presos políticos, con la violencia, con el Estado fascista y represor, pero yo me voy a presentar y no sé si en lista única y los resultados serían más o menos los mismos, y sería una oportunidad histórica de volver a contarnos y de...
Y todo está bien. Según nos interese. Si mi responsable va a un acto y no me gusta, encontraré la manera de justificarlo para que encaje en mi marco. Si va el tuyo, diré que es lo peor que nos puede pasar y que qué vergüenza hacerle el juego así a la derecha.
Y así van pasando los días. Y al final todo está bien. El viernes hubo república, lo celebramos, a las diez estábamos en casa, y ya está hecho y hecho se quedará para los restos. Ahora ven y cuéntame otra cosa, pero lo que es, es. Si no estuviste, dónde estabas. No me interesa que me cuentes nada.
Es una decisión acertada, ahora el problema lo tienen los otros. Ya hemos movido pieza y no sólo la hemos movido, hemos convenido en explicar que hemos movido la pieza de esta manera. A lo mejor tú no lo ves.
Altura moral. Superioridad moral, perdón. La izquierda con su superioridad moral. Repítelo, mételo en el texto. La izquierda española, con su superioridad moral...
Y eso.
Y vamos pasando el tiempo y lo vamos contando.
Y voy a poner un Tweet pero primero voy a ver qué está diciendo la gente que piensa más o menos como yo, no vaya a ser que me precipite y me esté cagando en alguien y resulta que ese alguien me esté esperando con otra cosa. Espera. Ahora.
Ahora no. Esto es tan viejo como la piedra Rosetta. Pero con caras nuevas.
Alentir la república. El corrector de word lo marca como incorrecto. Pero el corrector no sabe de relato. Chupito.
lunes, 12 de junio de 2017
Antes de ver Twin Peaks
Que me aspen si pienso ver las primeras temporadas de Twin Peaks antes de ponerme a ver lo que tengo en casa. Eso es no entender nada. El verdadero gesto Lyncheano es el de ver Twin Peaks 25 años después de no haber visto nada. Si se trata de que las cosas no tengan sentido, si se trata de que el espectador pierda el contacto con la linealidad del discurso, qué mejor, qué vuelta de tuerca más maravillosa que la de considerar que ver las primeras temporadas no conduce a nada. Que saber qué pasó con Laura Palmer me importa una puta mierda. Que no tengo ni puta idea de nada de lo que ocurrió en su momento, cuando tocaba. Que me da igual.
Entremos ahora en una pequeña reflexión, ya hecha en otros lugares con más glamour, sobre qué esperamos cuando vemos una película, cuando esa película es de Lynch, cuando tenemos expectativas, cuando esperamos que de lo que estamos viendo, podamos sacar alguna conclusión. Escribo textos muy largos, me dicen. Me dicen que cuesta seguir en ocasiones el hilo hasta el final, que lo hago farragoso. Que recuerdo a otros autores locales de estilo farragoso y ceñudo. Que podría sintetizar en algo lo que cuento y poder así transmitir las ideas con más claridad. Eso no tiene que ver con Lynch. No. Es otra cosa. Se trata ya no de hacer las historias largas, se trata de que el espectador, el que está leyendo, no sepa dónde está. Que no sepa de dónde le vienen. Habrán visto Carretera Perdida, habrán visto Mullholand Drive, habrán visto Inland Empire. Creo que he escrito sobre todas ellas. Da lo mismo porque no me acuerdo de lo que escribí. El tiempo pasa y los recuerdos que tenemos de las cosas son cada vez más parecidos a la ficción que a una reproducción fotográfica de la realidad. Nos parece todo más expresionista que hiperrelista. Qué pasó aquella vez que quisiste llamar a aquella chica durante años y nunca ocurrió. Ocurrió como lo recuerdas, recuerdas todo lo que crees que recuerdas. Crees por ejemplo, que no duermes por las noches, porque das muchas vueltas en la cama, porque estás inquieto, porque algo te preocupa, también puede ser porque no haya persiana en la habitación y de mucho el sol ya desde muy temprano y pienses que es más temprano de lo que es. Y te hablan de dormir con un antifaz. Un camisón de seda. Un camisón de seda en una cama con forma de corazón. El camisón no está solo. Dentro del camisón hay una persona. No sabemos qué persona es. Puedes ser tú. Pero sería dantesco que en vez de aparecer tú apareciera un tío. O no. Si aparece un tío quizás es que estoy queriéndome decir algo. O no. O puede que no te puedas sacar de la cabeza algo que tiene relación con camisones de seda que en tu puta vida has visto camisones de seda puestos por fuera del cuerpo de nadie y te estás haciendo ollas, confundiendo tu sueño con el de alguien que sí que tiene esos gustos y te los ha trasladado. Gustos caros. Gente leyendo el periódico. Todas las circunstancias han llevado a que vengas a escribir aquí. Ahora. Ahora mismo. Y están todos ellos leyendo el periódico como si fuera un club de lectura. Y hablan entre ellos. Y se queda uno. Uno solo de ellos. Miento. Se quedan dos. Solo están ellos leyendo el periódico. Tengo la cabeza llena de pelos cortitos. Me paso el dedo por la frente y suena ya la canción de despedida. Me llevo varios pelos. Pienso que es una imitación muy burda y que me he dado cuenta ya al final. Que ha habido un rato en el que de verdad me he creído capaz de hacerlo. Ha habido otro rato, hace un rato, cuando me estaba cortando el pelo, en el que me he quedado transpuesto. Ha sido un momento muy breve. Todo ha ido muy rápido. La música era muy buena, de una película moderna. Era india. Y no he querido preguntar. Demasiado simpático. Simón el Simpaticón. Me he puesto una camiseta adrede para cortarme el pelo. Esa camiseta tiene una historia. Una historia que hace que cada vez que te pones esa camiseta estás pensando en algo parecido a los camisones. No. No estás pensando en los camisones. O sí. Es una camiseta roja con el logo del partido. La llevas por la calle y la gente se te queda mirando. Piensas que deben pensar que es una camiseta de una empresa. Una empresa de Santa Coloma de Gramenet. Y te preguntan, los iniciados en la materia, porqué te pones la camiseta. Y contestas que es porque te has ido a cortar el pelo. Y lo he contestado y está pasando. Esto le debe estar gustando mucho a la gente que habla de sí misma en tercera persona. La tercera internacional. Cervezas en la calle. Un día entero sin probar la cerveza. Me he puesto la camiseta del partido para que la gente me pregunte porqué la llevo puesta y así poder contar toda una historia. Tengo que contar una historia que tenga algo especial. Y utilizar todos los días lo de la oficina móvil. Espero no soñar esta noche con camisones, porque sería la ostia. Lo vas a poner y me vas a decir que lo ponga y lo pongo. Supongo que a Lynch le debe pasar algo así. Por contentar a la gente, va poniendo cosas y cosas.
Si empiezo la serie hoy, igual me da por soñar otra cosa. Creo que conozco lo del enano ardiendo. O la cortina roja. O la cara llena de ampollas de la película de Cabeza Borradora. No hay ninguna necesidad de ver Cabeza Borradora, jamás. Y sin embargo, seguimos cayendo. Siempre, siempre, siempre, caemos.
Ya si eso voy contando.
lunes, 20 de febrero de 2017
Mil amigos en Facebook
¿Mil amigos? No tengo mil amigos ni de broma. Nadie tiene tantos amigos. Ni conocidos. Ni saludados. De vez en cuando veo a gente que dice que va a hacer limpieza de gente en el facebook o en el twitter, gente que no sabe porqué es amiga pero ahí está. Yo no lo he hecho nunca.
¿Por qué tengo yo facebook? En principio, no tuve facebook hasta hace pocos años debido a un interés méramente comercial. Estaba entonces en el trance de comenzar un proyecto de crowfounding para editar un libro. Yo, sí amigos, pese a todo lo que pueda decir, también he comenzado proyectos. Que no llegaron a nada, naturalmente, me acojoné y no seguí adelante. Abrí el facebook para dar a conocer el proyecto y todo eso. Creo que ya tenía twitter, no recuerdo bien. Como digo, el asunto aquel lo frustré porque me hice caquita y el facebook continuó.
¿Qué uso le daba yo al facebook? Hacía dos cosas. Colgar una canción que me molara, intentando no repetir y compartir lo que escribía en el blog. Como quiera que mi actividad en el partido también se relacionaba con la comunicación, el uso se fue aumentando. Cosas mías y cosas del partido. Como el grupo de música y la peña del Athletic también debían tener páginas y demás, pues más uso.
Y de ahí a ir compartiendo las cosas en los grupos de Santa Coloma. Y si alguien comenta o algo, más o menos de buen rollo, pues se le pide amistad. Y si te piden amistad, si no es alguien que ves que sale medio en pelotas (sea chica o chico), pues se la aceptas.
No sabría decir qué cantidad de esos 1000 amigos, son gente conocida de verdad. De hecho, amigos de siempre, de toda la vida, tienen una relación con el facebook escasa o nula. Ninguno de los tres sudamericanos del Seimar usa el facebook regularmente sin o es para piponear. El resto de amigos de Santako de siempre, usan facebook pero no es un constante publicar y publicar. Yo soy mucho más pesado. El blog, la canción, cosas del partido. Algún artículo sesudo sobre algo sin interés. Publicaciones en otras revistas o diarios locales. Y así.
Mil amigos.
Pensaba yo que si alcanzabas los mil amigos saldría algo, algún globito felicitándote o así, pero no. No ha pasado nada. Esta misma mañana, alguien, un bar creo, me ha pedido amistad. Le he dado que sí. Tengo conocidos que llegan casi a los 5000 amigos. De qué barbaridad estamos hablando.
Ayer en el Salvados se hablaba de lo hiperconectados que estamos, del enganche al móvil. Yo soy uno de ellos. Mirar el facebook, a ver qué se cuece. Mirar el twitter, a ver qué se cuece. Ahora también tengo instagram, pero no le hago mucho caso. Facebook. Lo que dice aquel, la pamplina de este, el artículo sobre tal cosa, esa foto mirando nosequé, los vídeos de gatitos o de niños, el partido, los críticos del partido, los del nuevo partido, lo que dice el equipo rival, la gente del pueblo. La importancia de la gente del pueblo. Gente del pueblo que te suena, te piden amistad, pasan unos días mirando la foto, al final le das. Gente de Santako que conoces de siempre, de vista, que no has saludado jamás, pero que en facebook te ponen cosas o te piden amistad y te preguntas... qué cosas. Y luego, en vivo, me cuesta hablarles. Supongo que nadie espera que hable.
Mil amigos en el facebook. No tengo mil amigos ni de casualidad. Y no es que sean mucho amigos tampoco. Bueno.
Decía el Zygmunt Bauman en el programa, que debió grabarse poco antes de morir, algo sobre la necesidad de no sentirnos solos, de no quedarnos fuera del mundo, de la sociedad. De lo que necesitamos estar en contacto con otros y saber que hay alguien al otro lado.
Mil amigos, ni de lejos. Ni quinientos. Ni cien. Cincuenta amigos... veinte. No sé. Amigos.
¿Qué es ser amigo o amiga?
Qué debate. Qué necesidad habrá.
jueves, 9 de febrero de 2017
Manifestación contra la estafa eléctrica a) y b). El orden de las cosas.
miércoles, 16 de noviembre de 2016
La responsabilidad individual, Reus, Santa Coloma... ¡Hola!
Ayer Santa Coloma vivió una mañana tremenda. Seis desahucios anunciados. Santa Coloma vive un problema dantesco con la vivienda, con personas de Santa Coloma que viven en un estado de precariedad, de falta de recursos, de dependencia de las ayudas públicas, subvenciones, etc., alarmante. De los seis, se pararon cinco. Cada semana se anuncian desahucios en nuestra ciudad. Una realidad que no es que se quiera evitar, es que parece de otra ciudad. Es una sensación como de doble realidad. Como de vivir en una ciudad en la que los actos de caridad se llevan a cabo regularmente y se confunde esto con la solidaridad, como dice el compañero Benju. Caridad contra solidaridd. Vivimos un problema de modelo, de sistema, de que no hemos cambiado nada durante estos años, la rueda de la economía nos dicen que vuelve a girar y sin embargo, muchos se han quedado fuera y ya no van a volver a entrar en el juego. En Santa Coloma tenemos los indicadores de pobreza más... los datos. La gente. Gente con la luz pinchada, pisos ocupados, precariedad normalizada. La miseria del ir tirando. Nos ponemos al frente de la manifestación sólo cuando hace demasiado ruido, cuando salen demasiadas fotos en las redes sociales, nos acordamos de decir que, ojo, que estamos ahí. Lo queremos ver. O no lo queremos ver. O no nos conviene que se vea. Que no se diga que somos una ciudad pobre, basta ya de mala publicidad. Que alguien, desde su voluntarismo, tenga alguna idea. La responsabilidad individual. A ver si viene pronto el fin de semana y se organiza algo.
El otro día, en la sala de espera de... cogí una revista. El ¡Hola!. Un ¡Hola! en el que en portada se ve a Adriana Marin y a uno de los sobrinos de la Duquesa de Alba, antigua duquesa de Alba, en el día de su boda. Una boda a la que acudieron y acudieron y acudieron. Una boda en la que se lucieron, en la que se vieron, en la que estuvieron. Adriana Marín, que a su vez es marquesa o condesa o nosequé y que trabaja en Vinçon, si no recuerdo mal, tiene esa cara de felicidad de quien está viviendo el día más hermoso de su existencia. Un día estupendo rodeada de amigos, familiares y personalidades varias de la sociedad española. Es la cara de felicidad de quien tiene ante sí no solo un presente magnífico, implicada en su trabajo, también un futuro maravilloso y creo que hablo en nombre de todos y todas al decir que espero que ese futuro sea muy duradero. Me sentí tan bien y quedé tan extasiado con las imágenes, con ese rostro que transmite felicidad y limpieza de espíritu así como bondad sin mácula, que pensé que, realmente (sin menoscabo de el resto de informaciones de la publicación en la que se referían las cuitas de personajes sino de tan rancio abolengo, si de singnificada importancia), esas personas podrían ser un ejemplo, un espejo. La verdad es que no sé qué estoy diciendo.
Pensando, debe tener que ver con la responsabilidad individual. Es decir, al final, la culpa es mía. Y tuya sobre todo.
miércoles, 1 de junio de 2016
Crónica del #plegramenet de mayo (o junio). Dame tu ausenci que sabe a beso.
Siete horas de pleno. Empieza a las siete de la tarde y sales a las dos de la mañana. El pleno es tan largo que te da tiempo a ir a un acto en Barcelona, volver y hacer como si no pasara nada. Como si el tiempo no tuviera importancia. No afino mucho con los chistes hoy. He soltado dos o tres durante todo el día y no me veo suelto. Así que esto hoy no va a tener gracia. Ni siquiera la foto es adhoc. No significa nada. En plan 'soy como el cubo de la basura, estoy siempre ahí'. Una gracia sin gracia.
Llegué un poquito tarde al pleno. Mis compromisos como instigador de la revuelta reformista me retuvieron en otro lugar hasta las siete y me perdí los primeros diez o quince minutos. Qué tal, me siento en los asientos de prensa, sólo está el compañero Xavi Chica. Parece que el pleno no le interese a nadie, pero hay bastante gente hoy. Todo el mundo dice que el pleno va a ser calentito, que va a ir para largo, que... somos unos jodidos adictos a esta mierda. Amigo. Una vez que pruebas un pleno de siete horas, vas buscando plenos de siete horas por todas partes hasta que los encuentras. Conocí a un tipo en L.A., que había vivido plenos de once horas. El tipo era un tipo duro. Era un buen tipo. Es un gran tipo. ¿Dónde estaba Núria Parlon?
La alcaldesa había confirmado su participación en un acto en Barcelona junto a Diosdado Toledano por la Renta Garantida. Reunión de alcaldesas, iba a ir Ada Colau. Ada no está, Ada se fue. Tengo una cultura musical tal que me permite hacer chanzas con canciones. Soy muy gracioso. Me he llegado a creer tanto que soy un tipo gracioso que intento ser gracioso todo el rato. En el pleno, la frase ingeniosa, el tweet molón, el comentario guay con la gente, con los políticos locales. Me siento luego en casa y pienso, qué pena. Qué pena, Antonio. Si nunca has sido gracioso. Núria Parlon no estaba aquí, estaba allí, nos mandaban tweets y nos decían, está aquí. Qué bien. Compromiso con la ciudad. ¿Alguien sabe porqué el pleno fue el martes? Y no se te ocurra preguntar. Tú también llegas tarde y no te digo nada.
A A. le gusta la barba de Zambrana. Me dijo, se ha dejado barba y le queda bien. Bronceado, vestido ya de manera informal porque el verano llega, debe estar apuesto y... pues no. Esa barba no mola. A A. le mola, a mi no. Me gusta la barba normal, sin recortar, y Zambrana la lleva recortada así por abajo. No me gusta. Respecto al resto de looks, camisetas rojas de la gente de SOM por algún motivo que desvelaremos más adelante (porque siempre hay un motivo y una foto y un slogan y una reivndicación y ni siquiera el detalle del agua de las botellas de agua es inocente, que hay que twitearlo y decir que el agua de las botellas de agua es llevada por los mismos regidores de SOM y... pereza, un poco, la verdad), melena juvenil de Salva Tovar, corte de pelo algo más adecentado de Dimas Gragera que ha dejado atrás el pelijismo que le caracterizaba para lograr algo más llevable, estilo administrativo de Maria Duarte, negro suéter de Sevilla, cosas anchas de Fornés, surtido de elementos diversos en los regidores de PSC, destacando las siempre flamantes bambacas de Rodilla, el rollo zíngaro de Pedro Cano y... bueno, pues poca cosa más. Y bueno, Laura Rodera que es la más. Y ya está.
¿De qué fue el pleno? Yo que sé. No estaba pendiente porque estaba pendiente del pleno. Me explico. Estaba tan pendiente de estar pendiente del pleno que no estaba pendiente del pleno. Yo estaba en el pleno porque tengo que estar pendiente del pleno, he de escribir sobre el pleno, pero en el pleno tengo que escribir en el pleno, por lo que no puedo estar muy pendiente de lo que pasa en el pleno. Porque estoy en el pleno. Yo creo que está claro. Si estás pendiente de una cosa, no puedes estar pendiente de otra. Es como cuando estás en un sitio y quieres estar en otro. Como cuando estás en Barcelona y debes pensar, 'ahora tengo que verles la cara a esos otra vez..., que no entienden nada, que van de alternativos y de izquierda guay cuando yo estoy aquí dando los mejores 40 años for ever de mi vida sin que no me digan ni una vez que...'. Pues esa sensación.
Puntos del orden del día. Como quiera que ya llegué tarde voy ya con la sensación de que no me estoy enterando y por no preguntar... el periodista que no pregunta. El pleno va a durar siete horas. Conozco a un tipo en La Bisbal que va buscando plenos por Europa y vivió uno en Krasnaya Poljiana de 14 horas. Un buen tipo, un gran tipo. Ponme otro vaso de jugo de...
Yo que sé. De verdad. El pleno. Siete horas. ¿Qué más da? ¿Qué ganamos contando lo que pasó? ¿Qué ganamos contando que lo del Mercat del Fondo es como una movida rara de que yo soy el ajuntament y tú una empresa y yo acabo esta obra y la pago yo pero no la tengo que pagar yo y ahora me dicen que...? ¿Qué conseguimos explicando lo de Grameimpark y Megaimpuls? ¿A dónde quiero llegar diciendo que la deuda de una empresa municipal y el papel de la otra es muy interesante y yo te digo que la deuda es exorbitada y tú me dices que haces lo que puedes y que aquí podrías hacer otra cosa y que haces lo que puedes?
Porque al final va todo de eso. Yo te digo que tú podrías hacer otra cosa y tú me dices que haces lo que puedes. Siempre así. Un pleno tras otro. Un día y otro día. Siete horas con la misma canción. La moneda social, el regidor Pedro Cano hace un speech que no parece tomarse en serio ni su propia camada. La moneda social, la democracia económica, la red de economía, el nosequé... dan ganas de votar a favor. Vamos a votar a favor! vamos!! Nah. Es Pedro Cano, es de Jaén, pero nah. No cuela. En la Vanguardia sale una noticia en la que nos dicen que la moneda social mejorará el C02, porque la gente se mueve menos y entonces... o te ríes o te enciendes. Y si te ríes te están esperando. Y si te enciendes, te están esperando. No votamos a favor. Pero estamos ahí, Pedro, dispuestos a ayudar. Momento Zambrana: con su barba recortada pregunta con toda la mala leche qué es eso de la democracia económica... y la red de economía social... Es igual, no le hubieran dejado contestar a Pedro Cano. Nunca le dejan.
Va, deprisa, que tengo prisa, que me tengo que ir.
¿Por dónde voy? ¿Qué me queda?
Conozco a un tipo que una vez vio un pleno de tres días. Creo que era de Cuenca.
Me he ido. Es una frase muy común en el pleno. Se me ha ido. Lo siento, se me ha ido de la cabeza. Ahora después lo digo. Si tengo tiempo. Son siete horas. Voy buscando plenos, los plenos más largos. Plenos donde me de tiempo a ir y volver y no perderme nada.
La CIBA, que me sabe a humo. Que va a ser un centro de algo, de formación, una uni o algo así. Y nosotros y Som decimos que no, y ellos que venga, que ya estamos. Y que al final, verás, que será una uni. Y que claro, si es una uni, será privada, porque la uni pública está fatal. Y para eso no hace falta estar un año dando vueltas. O sí.
Y llega la Pinta Verda y se arma la de dios es cristo. Esta crónica no es parcial, es imparcial. Al revés. Es parcial. El tema es que la Generalitat se ha ciscado en el tema de la Pinta Verda, el Ajuntament no quiso decir nada y presentar las modificaciones en plan fiu y se destapó el pastel y las cosas que dice la Gene son más o menos las que decimos en la Plataforma, sale el Sancho y dice que bueno, que lo que dice la Gene es lo que dice la Plataforma, que es un nyap eso de la Pinta Verda y el regidor Mas, al principio muy bien pero se desata y llama a la Plataforma satélite de los partidos y se lía la de dios. Catapum. El Fabá entra en trance, mal trance, y se pasa tres pueblos. Así, se puede tener razón o no, pero, yo que sé, compañero. Mal. Porque ya pierdes el turno. Y ya tienes el argumento. Ha insultado a un regidor. Uno de los tuyos. Mal. Y cuando Sevilla Alexandra dice que no van a conseguir dividirnos y que no apliquen el modelo psc en santaco a la plataforma se vuelve a liar, y al parecer es super grave todo y hay que pedir disculpas y luego Patricia lanza otro ataque sin compasión y se lo devuelven y esa mala cara que traía ya no se va.
Y es siempre así. Una propuesta, una moción, un punto, se discute, se dirá la barbaridad que se diga, pero oye, con mayoría absoluta, montar esos pollos. Esas caras. Esas recriminaciones de 'voto lo que me da la gana'. Pues adelante, si no pasa nada. Si son tres años. 14 regidores. Puede volver a pasar. Pero no hay que enfadarse, esas caras, ese tono de admonición. Porque ya la gente va esperando el momento. Va la cosa tranquila, a ver lo que tarda en petar. Y siempre peta. Siempre.
Y la gente lo sabe.
No sé. Qué queda. Las mociones. Me tengo que ir. Mociones por la educación pública y de calidad, buenas palabras, momentos entrañables, Mireia González batiendo la marca mundial de lectura, moción para la recuperación de espacios vacíos con un Fermín Chueco pidiendo la palabra que me recordó a los pregoneros de mi pueblo, a las páginas esas de alabanza a la Virgen que tiene el programa de las fiestas, gracias, gracias. No aprobamos la moción de los espacios vacíos ni la de la tarifación social, por el mismito motivo que... no la aprobamos porque es mejor que vengas al regidor, le cuentes lo que te pasa y nosotros lo vamos haciendo, porque ya lo vamos haciendo. Y venir a proponer esto nos hace perder el tiempo a ti, a mí, y al resto de los ciudadanos de esta preciosa ciudad. Diego Arroyo, una y pico de la madrugada, una explicación de las virtudes de la tarifación social de... para decir que nones. Alexandra Sevilla, que también tiene su humor, le pregunta... y el regidor responde gustosamente... Una y pico de la mañana.
Una moción que presenta Ciutadans por los derechos de los celíacos (últimamente a cantidad de peña le duele la barriga y le sienta mal todo, quizás esto ya pasaba antes, pero ahora, no sé es como que hay más casos); una moción por lo del Otegui que podría haber servido de lucimiento para el Oriol Corral pero es tan tarde que pasando de todo; una moción por los cuatro de Can Vies que sirve para que Joan Pastor nos ponga a todos al borde de lo borde y... poca cosa más. Poca cosa más, dice el tío.
Siete horas de pleno.
Yo no sé cómo la política no interesa más a la gente. Siete horas, calentico o fresquito, viendo momentos de amor, de recriminación, de ausencia. La ausencia.
No te vayas. Me voy.
martes, 5 de abril de 2016
Crónica del #plegramenet de abril. He visto el futuro: Som d'Esquerres.
Una decepción a la altura de las circunstancias. Una decepción como la que debe sentir ese republicano que a lo mejor, figuradamente, quiere que venga alguna vez una nueva República y se tiene que conformar con palabras de Machado, vindicaciones de Miguel Hernández y paseitos con bandera. Una decepción de esas de 'no podemos hacer más cuando se está gobernando'. Ese es el sentido de todo.
No se puede hacer más porque estamos en el Gobierno. Este es el tema que se va a ir repitiendo. Tú estás gobernando en este sitio y tú en el otro y hacéis lo mismo. Españoles somos todos. Som d'esquerres. Dos cargos de confianza con vuestro carnet, que no con el nuestro, para que digáis que somos sectarios. En absoluto. De sectarios nada. El equipo de Gobierno socialista, se caracteriza desde tiempos pretéritos por coger de aquí y de allá, para demostrar que todo el mundo es susceptible de ser captado. Algunos creen en la persona, otros en el proyecto. Republicanos viendo desde la bancada como la lucha por la república se queda en bellas palabras de Machado sobre hombres valerosos que ya no existen. Las mujeres valerosas, las que paran el viento con las manos, esas ya no están. El equipo de Gobierno socialista se caracteriza por hacer como que hace y los demás en decir que no hace, suspirando algunos, ay para que no les escuchen y no recibir el golpe certero que les condene al ostracismo en la ciudad de la paloma y de la rata. En la plaza de la Vila, palomas a las siete de la tarde. A las dos de la madrugada, una rata saltironea por la plaza y se cuela por una rendija hacia el Ajuntament.
A las siete de la tarde empezó todo. Puntos relativos a motivos económicos que ya comprenderán que servidor, con la cabeza rellena de mucosidad, una mucosidad que siento como espesa, me impide comprender. Comprenderán y comprender. Bellas palabras de Machado que el tiempo no borrará nunca. Votamos a favor de esto, y me revuelvo en mi asiento, porque no se trata de recordar, se trata de buscar el futuro mejor, pero eso ya es otra cosa. Recojo los motivos por los cuales... el frío sol de invierno. A las siete de la tarde, economía, balances, el dinero que no os gastáis, lo podríais utilizar para otra cosa, no me dejan, compañero, no me dejan compañera porque la vida está fatal y ese gobierno pérfido del PP a mí no me deja y oiga usted, no me mire y dan ganas de que entre una chulapa y reparta anises, En la playa de Sant Adrià olía a anís, me lo contaron el otro día. Estoy hablando mucho últimamente de Sant Adrià.
Abogacía del Estado, otro punto y empieza el baile. Porque todo, todo el contínuo espacio temporal de los últimos meses iba a desembocar en la intervención de Esteve Serrano. Primero hago un pase jurídico (que no jurista) y luego, cuando me exponen los de la oposición que no es transparente el organigrama municipal por el que el nombre de Santa Coloma vuelve a estar en los papeles, les saco a relucir que en Badalona (sin nombrarla, por eso de la buena vecindad, será, o las fotos en los diarios, será, oh qué será que será, que va... Ana Belén, ya no canta), los cargos son tantos que no caben en esta sala, y que son muchos de ellos de Podemos que no pillaron cacho por otro lado, y vosotros qué decís si lleváis mil años en El Prat (yo hablo mucho de Sant Adrià, pero hay quien supura El Prat y Sant Feliu) y hacéis lo que os da la gana, y vosotros en Lleida nos dáis apoyo y no decís ni pío. Y antes de eso ha dicho lo de que tenemos gente independiente en el organigrama y dos personas con carnet de otro partido, ese es su mérito. Debe ser. Toda la legislatura esperando este momento. Poder decir que tal y cual son de la izquierda transformadora, qué decís. Tanto rollo y nos los llevamos donde queremos. Y es el turno de las réplicas y Alexandra Sevilla de la Gent d'Esquerres ICV-EUiA y no me dejo nada, interpelada por lo del Prat y por lo de los carnets, arma el taco, y desde las bancadas del público el murmullo del 'ben dit' va creciendo, pero con miedo, porque la Hydra de Lerna puede despertar. No lo digáis muy fuerte, que vienen. Pero ella sigue, y dice que no hagan demagogia, y que hablen de Santa Coloma, y que lo de los carnets de los directivos ha quedado espantoso, y el 'ben dit' sigue creciendo y... y yo veo venir la tormenta, pero debe ser que tengo la cabeza llena de mocos y he creído ver un caballo blanco relinchar en la misma sala de plenos y no recuerdo haber tomado paracetamol en tan altas cantidades. Alexandra Sevilla pone el Pleno patas arriba y no parece que la cosa vaya a aflojar. Dimas Gragera de Ciutadans se pone estupendo y ya no echa capotes que saca el colmillo y les dice que si en Lleida lo hacen mal, que lo denuncien, que ellos no gobiernan en Lleida, y no le ha hecho ni pupita ni nada. Y entonces el interpelado podemita, que debía defender el honor de los suyos, de los morados a los que han acusado de 'colocados' habla de algo confuso y uno quisiera que... qué quisiera yo. Y es como que te han dicho algo muy gordo y tú no has dicho nada. Pero no pasa nada. Es la vida. Yo soy muy valiente, y no todo el mundo es tan valiente, ya no valiente, ocurrente. Digo chistes, bromas, chanzas, befas, chascarrillos, somos españoles todos. Españoles y republicanos. Pero solo cuando estoy con mis amigos. Y la alcaldesa reprocha además a los cuperos que mucho desobedecer pero dar palmas con la Abogacía del Estado. Y la parte final de la intervención suena a 'con lo que me lo estaba currando y esto de la abogacía... no os riáis, joder'. No gustan ni la notas de prensa, ni los comunicados, ni nada. Parando el viento. Recordando el pasado sin mirar hacia el futuro. No queréis a Santa Coloma. Españoles somos todos.
No lo hagas muy largo.
Y queda el tema así como en nada. Y tenemos más temas, no se vayan. Son siete horas. Siete horas dan para mucho. Pienso que si muevo la cabeza así se me pueden salir los mocos por las orejas, pero no pasa. El CER Raval, vuelve a salir. Como eso, pues eso. Como necesita un empujón, pues se le da un empujón. Y el regidor Diego Arroyo da en la tecla. Con argumentaciones diferentes, se llega al mismo sitio. Ni los nuestros, los de la Gent d'esquerres que quieren la municipalización, porque es un servicio que no tira, ni Ciutadans que por el lado de la libre competencia dicen lo suyo, están de acuerdo con el tema. SOM incluso vota en contra. Albricias. Algo pasa. Diego Arroyo lo ve. Todos lo ven. Sea por un sitio o sea por el otro. Están solos.
No están solos. Lean la prensa. Si leen la prensa, la impresión es otra. Bueno, no tanto. Si leen la prensa, la mpresión es que pueden con todos. Pero sigue siendo lo mismo. Son ellos y en frente los demás.
El tema del contencioso vuelve a salir, porque no es un contencioso, son más. Y no es normal, y para el consistorio es un tema de persecución y habrá que decir que bueno, que algo habrá que no se hace del todo... tú no quieres a Santa Coloma.
Los puntos. El pleno. El punto de la Pinta Verda. Suena a cosa antigua, a cosa de otro tiempo muy pasado y es de hace un año. Una modificación. Si esto ya estaba... pues no, una modificación. Me dejo puntos. He perdido el papel. Lo tenía todo apuntado. Aguanté hasta el final, pero perdí el papel. Yo lo pasé mal, pero los regidores que no hablan lo deben pasar peor. Siete horas sin hablar, sin intervenir. Ahí.
Mociones, declaraciones. El tema de moda, la prostitución infantil, la prostitución, el nuevo 'quién piensa en los niños', esta vez no apareció porque no se pudo consensuar una declaración otra vez cargando contra quien te dije. No colau, perdón no coló. Declaración contra el asedio escolar, de Ciutadans para el cielo. Cambio de nombre del pasaje de la Victoria a pasaje Julia Romera.
Es tarde y uno, imbécil, piensa que eso de rememorar a las doce de la noche la vida y obra de Julia Romera, es una crueldad... pero es eso, soy idiota. Aquí estoy. Mociones.
La moción de conmemoración a la República. Se estrena Salva Clavera, de Esquerra Republicana, pidiendo la palabra y reivindicando tanto la República como la República Catalana. Ay, República catalana no gustar. Símbolos monárquicos quitar, mal. Contramoción de toda la vida, con recuerdo y Machado y a correr. Viva la República, pero no toquéis nada. Cuando habla Jonatan Fornés, de los nuestros, diciendo lo de que este año será el último que lo conmemoremos porque... 'pues no te queda vida', dice un señor de atrás. Nos creemos que... y no.
Más mociones, seis mociones a partir de las doce, hay tanto lío que se impone un receso. Moción para declarar el 11m día de las víctimas del terrorismo, habla el presidente de la asociación catalana de víctimas y Xavier Valls. Uno es más digamos 'lo de toda la vida' y el otro más 'emotivo'. Aplausos para ambos pero la moción no se aprueba sin pollo. Porque se presenta otra contramoción a favor de las víctimas de las violencias. No. No vale. Se aprueba la primera, que es de Ciutadans. Durante su intervención, Joan Pastor habla de unos aviones de Arabia Saudita que siendo las horas que son, que son las doce y pico de la madrugada... qué quieres que te diga.
Más mociones. Las digo al tuntún, la de defender las diputaciones que presenta el PP y que no sale adelante, creo porque la presenta el PP. No sé, qué más, una de los nuestros en defensa de los servicios sociales, que sale adelante, otra para recuperar lo del Aigues Ter Llobregat, que también, creo que llevo cinco y me falta una. Faltan dos. Qué dos eran. Una es la de los refugiados de Turquía contra el pacto de la Vergüenza. El PP vota en contra de la moción. El PP parece que no está, pero cuando aparece... la regidora Laura Rodera, cumple años durante el pleno. Siempre tienen que llamar la atención, o por su elegancia, o por organizar las fiestas más bizarras. Me encanta. Falta una moción y nos vamos. Va. Ya todo es con prisas y dejando las intervenciones a medio hacer.
Día de recuerdos, a los mossos y a la mossa, a Manuel Fernández y Dolores Solís, uno muerto hace 43 años y ella fallecida este finde, y al Joan Camarasa, muerto también la semana pasada, que fue recordado con una banderita cubana y una fotocopia... ay. Bueno. Es el detalle.
Pues nada. Que al final, la imagen de la rata entrando en el Ajuntament y son las dos de la madrugada y esto no sé yo que...
¿Se vio en streaming? Pues si ya lo vieron, pues casi mejor.