lunes, 10 de noviembre de 2014

El #9N. He vivido un día.

Había que ir a votar y había que cumplir con la vocación primera. Ir a votar. Ya lo he dicho. Había que ir a votar porque, como ya he comentado en alguna ocasión, si alguna vez me van a preguntar qué modelo de Estado es el que me gusta más, no quiero perder la ocasión de decir algo. Si, a la primera pregunta. No, a la segunda pregunta. Si, no. Luego entraremos en detalles.
La mañana no pintaba bien. Frío, mal rollo, mucho mal rollo, ninguna gana de ir hasta el Puig Castellar, pero finalmente uno se arma de valor y se arma también de otras cosas que un día si eso ya les explico y hacia el Puig con ánimo y decisión. Decisión de ir a votar que ya estaba tomada de antemano y ya que estás, echas una mano a los compañeros de coalición que estarán allí recogiendo firmas para denunciar al Gobierno de España ante Naciones Unidas y la ONU, perdón, la Unión Europea, para que nos dejen votar con garantías democráticas. Camino del Puig, por la calle Víctor Hugo, me doy cuenta de que hay más gente de la que yo esperaba camino del Puig. Por la calle Víctor Hugo. Voy deprisa y adelanto a gente que conozco. Voy a votar y me dicen que me he equivocado, que yo no voto en el Puig, que voto en Can Peixauet. Pues ya que estoy en plan fallón, me voy a quedar hasta la hora de comer con los de las firmas. No sé si estorbo, o piensan que qué hago ahí, o con qué cara me puedo meter dentro de la mesa a pedir firmas, bueno. No sé. El caso es que empiezo el día de la consulta. Un día para vivirlo. Para hablar con la gente, para ver caras conocidas, para hablar con mucha gente, para que te vea la gente, para ver a gente que te sorprende, para sorprender a la gente, para hablar con la gente, para explicarle a la gente lo de las firmas, para explicar una y mil veces que tú has votado que si-no y que no pasa nada, que no pasa nada, que no pasa nada, pero que has votado si-no y lo tengo que contar, que hay que hablar con la gente, con toda la gente, con los tuyos y con los otros, porque todos tenemos cara y a todos les tenemos que conocer y reconocer cuando nos vean.
La consulta es el momento más esperado en la vida política catalana de los últimos, digamos, cincuenta años, como aquel que dice. Con una consulta que unos llaman de chichinabo, otros butireferendum, otros una movilización, y otros un proceso participativo, y otros hacerle el juego a la derecha catalana, y otros... Lo que iba a ser una consulta, un referendum más o menos en condiciones, termina siendo una especie de manifestación a la que no está llamada a participar una buena parte de la población, la que votaría que No, porque nadie la ha movilizado. PP, Ciutadans... no han llamado a participar. Y son mucha gente. PSC, que en principio, sólo en principio, estaría por el Si-No, tampoco ha llamado a participar. Son mucha gente también. Así que se supone que sólo irán los del Si-Si a la independencia y poca cosa más. Yo pensaba eso, que iría poca gente. Los indepes del pueblo, y algún federalista que se ha enterado de que el Si-No, le encaja, como yo. Poco más.
Y mi sorpresa es bastante grande, porque en la mesa de las firmas empiezo a ver caras de gente que no son indepes, nacionalistas, 'de santa coloma de tota la vida', veo peña del barrio que sé que no son de estelada en el balcón. Ni mucho menos. Van saliendo cifras de participación y aunque no tienen nada que ver con las de unas municipales, la gente parece contenta. Estamos contentos. Yo veo a mucha gente, aunque alguna compañera me dice que lo que pasa es que hay pocos sitios donde votar y se concentra todo el mundo en pocos sitios. Yo sigo pensando que, con la poca chicha con la que han dejado todo esto de la consulta, en lo que se había quedado, iría poca gente a votar, lo dicho, los convencidos del Si-Si. Mi expectación iba en aumento.
A comer. No me voy a comer, ya que estoy me quedo allí. Versión oficial. El día es muy interesante. Versión oficial. Esto hay que vivirlo. Me pillo un bocata en la petanca. La petanca merece un blog por si sólo. Si alguien quiere hacer una entrada sobre el bar de la petanca de Víctor Hugo, está retado. Bocata de bacon enorme y buenísimo que me salva un poco la vida, porque caía desmayado. Recogida de firmas: si, estamos recogiendo firmas para que la Fifa cambie el tipo de cesped de los campos de fútbol... y contra el gobierno español; estamos recogiendo firmas para abolir el sistema métrico y contra el gobierno; estamos recogiendo firmas para presentar una denuncia ante la ONU y la Unión Europea contra el Gobierno.... no hace falta que digas más. Es nombrar al gobierno y la gente agarra el boli. Independentistas. Y personal enfurecido.
En Santa Coloma de Gramenet tenemos fama de no ser de aquí. Fama que a veces hemos fomentado nosotros mismos. Seamos sinceros. Independentistas de estelada en el balcón, de sentimiento patriótico, no parece haber muchos. Los hay, no quiero decir que sea falso y las cifras de ayer ahí están, pero pienso que hay mucho independentista enfurecido, antipp, anti corrupción, 'basta que no me dejen votar para venir y que se joda Rajoy'. Muchos así. Y son tan válidos como los que tienen todavía a Felipe V boca abajo.
Le estamos haciendo el juego a quienes nos matan, nos explotan, nos roban. Compañeros, ayer había que estar allí y ver que había más gente de la que nos creemos a la que podríamos llegar. Podemos llegar a los que fueron y a los que no. A todos. Pero no despreciar a una parte o la otra. No somos de todos, pero hay de los nuestros en todos los campos.
El día avanza, la tarde va pasando. Me encuentro hasta con cinco ex compañeros del colegio, de mi clase, del Seimar. A la Olga F., me cuesta mucho reconocerla, pero ella a mí no, porque dice que estoy igual. El resto sí que me reconoce rápido. Aquí, pasando el día. ¿Y os pagan o algo? No, nen, esto es por la causa. Risas.
He visto cosas. He visto al Mudo yendo a votar a una consulta que no vale para nada y que todos sabemos que van a copar los independentistas. He visto cosas.
Voy a votar a Can Peixauet. Vamos. Un detalle que se vengan conmigo. Vamos. Mucha gente por la calle, vamos comentando. Yo estoy flipando porque he visto a mucha gente que no habría pensado jamás que... Voto en Can Peixauet, hago el numerito de taparme la nariz para que me hagan una foto que no pienso publicar jamás. Quizá sea la última foto. Qué pena. Ya habrá salido en algún sitio. Yo también he sido de los que se ha hecho una foto votando. Qué risa. Gente que no te esperas que vaya a votar en un referendum, una consulta, una nada que han dicho que no vale para nada, pero que va, con su camiseta del Real Madrid, apretaíca. Esta gente no va a votar Si-Si, ni de broma. Y lo sabemos. Lo sabemos nosotros, pero no parecen entenderlo los voluntaris. O al menos todos los voluntaris. Y de eso se trata, que peña que va a votar que No, vaya y lo diga. Yo digo que No. Y muy bien que hacen. Desobedeciendo.
El recuento. Tápense los oídos si no quieren oír cosas feas. Los votos del Si-No y del No van apareciendo. Pocos, pero están. Gana el Si-Si, claramente, pero esos votos duelen mucho. No se puede ser arte y parte. No se puede estar contando los votos opinando sobre ellos. 'Es que esto es Santa Coloma'. Los votos del No-No se computan nulos, cuando creo que son un No claro y... 'Qué hubieran hecho la pregunta clara, o sí o no, ara que es fotin', dice un voluntari y otro le contesta que eso es cogérsela con papel de fumar. Van al montón de Otros y ya se decidirá. Una voluntaria que cuenta votos califica de burro al que ha votado 'no-si'. En otra mesa, el mismo voto. Les digo que puede ser un anarco, no quiere estado y sí que sea independiente Catalunya. Hay debate. Eso sí, sea como sea, dejan estar presentes en el recuento, no nos preguntan nada. Todo el proceso de recuento de votos, opiniones y tontunas aparte, es perfectamente homologable a lo que se hace en unas elecciones normales. Un poco más informal, si se quiere, pero no hay púas con los votos del no o del Si-No. Hay que decir de vez en cuando que uno ha votado Si-No, para que las formas no se pierdan. El respeto a la diferencia. Un poquito de por favor. Al salir, el voluntari que se mostraba reacio a considerar nulos los no-nos, nos dice que si hemos votado Si-no, es que somos de Icv-Euia. Era lo que pretendíamos. Somos los únicos que lo han defendido.
En Santa Coloma hay 17417 votos. De ellos unos once mil del si-si, el 63'4%. El 18'3% del Si-no. El 10'8% del No. El 7'5% de otros. ¿De dónde salen esos cuatro mil votos del si-si que no son de Erc, Ciu, o Cup? Alguno nuestro habrá, claro, pero... ¿De dónde salen? Enfurecidos. Gente que está hasta los mengues y que quiere algo nuevo, lo que haga cambiar algo todo esto tan así que tenemos. ¿La independencia? Sea lo que sea eso, se vota. Y todo lo que huela a PP, fuera. Eso es así. En el resto de Catalunya, en Catalunya a secas, han votado 2.250.000 personas. Creo que más. Este dato es de la una o así de la madrugada. 1.800.000 independentistas. Dicen que es el techo.
Hoy toca decir si son muchos, si son pocos. Respecto a qué. Respecto a quién. No nos ponemos de acuerdo, para unos es mucho, para otros poco. Para unos legitima, para otros pone freno. No sé.
Yo vi cosas ayer que no me esperaba, gente que no encuadraría jamas en un proceso participativo como este, pero que se mueven sólo porque el PP dice que no. Otra gente que debería moverse y que se quedó en su casa, con motivos muy razonados. O muy de tripas. De no sentirlo.
Celebración en la plaza de la Vila. Llegamos tarde. Ya no era el momento. Bufas por ser federalista, por haber votado si-no. Tolerancia y respeto. Que nos hemos equivocado, que eso no lo entiende nadie, que yo me quiero federar con Europa que debe ser lo más. Y ya está. Cada uno con su perra gorda.
Fue un día intenso el de ayer. Un día para vivir y para contarlo. Contarlo mal. Con el frío, con la lluvia, con hambre, con... Menos mal que yo sé porqué. Aunque esté mal, yo lo sé.
Lo demás es analizar datos, darnos cuenta de lo que estamos diciendo, de lo que estamos pidiendo, de lo que nos están pidiendo y de la gente que tenemos detrás. Del respeto, de la tolerancia, de que somos más diferentes de lo que nos creemos y que no podemos guiarnos por los tópicos de siempre. Aunque hoy nos digan que nada vale para nada y que todo es inútil. Y que habrá que hacer algo para que algo cambie.
Y no sólo el color de la banderita.

8 comentarios:

  1. Muy interesante la crónica.

    Yo esperaba más participación, ha sido muy poquita, no?

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    Respuestas
    1. gracias, marta.
      finalmente parece que ha participado poco más que el número de votos que sacó el llamado, mal llamado, bloque soberanista. hay que decir que ni pp, ni psoe, ni ciutadans llamaron a votar y que mucha gente de otros partidos ve con recelo todo este proceso, por lo que el número es más o menos normal. da cuenta de dónde están las cosas y de qué se puede esperar.
      gracias otra vez.

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  2. Muy buena crónica, monsieur. En realidad era previsible todo lo que ocurrió el domingo, teniendo en cuenta que Rajoy llevaba mucho tiempo comprando papeletas. Y parece que se dispone a comprar también todas las de la siguiente rifa.

    Feliz comienzo de semana

    Bisous

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  3. Crónica curradísima, pegadiza. No la comparto del todo, pero se agradece al menos que deje a un lado los topicazos de El País, La Sexta, El Periódico, Ara, etc. Se me ha hecho más entretenida la eterna espera en la renfe (os queremos ferrocarriles del Reyno). Santa Coloma me ha sorprendido gratamente.

    Un votante del Sí-Sí.

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  4. Hombre, hay cosas que dan más grima en el mundo que una fuente de chocolate... no? Un peluquín, unas orejas con cera, unos palitos de pescado fritos, una falda de encajes beiges que parezca una cortina...

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  5. Qué diferencia hay entre la pregunta una y dos? ... Perdone mi ignorancia.
    Lo del frío sí que no me lo creo.

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