martes, 10 de febrero de 2015

Baal

Era joven Baal y se sentía solo. Era joven Baal y el mundo que había creado, el mundo que había pensado, le parecía que estaba vacío. Era joven Baal y pensaba que toda la fuerza que tenía se malgastaba en asuntos vanos. Era joven Baal y lo hacía y lo rehacía todo una y otra vez, pensando en que volviendo a empezar, encontraría el camino correcto. Era joven Baal y lo borraba todo. Era joven Baal y no veía el sentido a nada. Era joven Baal y se vestía como un anciano. Era joven Baal y soñaba con asuntos de índole administrativa. Era joven Baal y tarareaba canciones que no sabía dónde había escuchado. Era joven Baal y ya se aburría de las canciones que él mismo había inspirado. Era joven Baal y soñaba que era innecesario ser Baal. Era joven Baal y no encontraba ningún motivo para ser Baal. Era joven Baal y todo corría peligro. Era joven Baal y desaparecía. Era joven Baal y pensaba en la extraña sensación de estar tan solo. Era joven Baal y quería ser viejo y ser Baal y estar al final del camino y no tener ya nada en lo que pensar. Era joven Baal y fue viejo Baal pero no le gustó a Baal y volvió a ser joven Baal. Era joven Baal y no sabía qué le pasaba. Era joven Baal y no le encontraba el gusto a ser Baal. Era joven Baal y probó de crear a otro Baal para saber qué le pasaba a Baal y no lo supo y si lo supo se lo calló o no lo quiso aceptar. Y era joven Baal y pasaba el tiempo y Baal se dio cuenta de que si estaba solo, algo debía hacer Baal. Y era joven Baal y algo pasó que encontró Baal a alguien a quien no había creado ni pensado Baal y le gustó. Y era joven Baal y no se planteó Baal que hubiera alguien más. Y ya no estaba solo Baal. Y había alguien más con Baal. Y ya Baal dejó que el mundo siguiera su curso y el mundo fue feliz como era feliz Baal. Y ya no estaba solo Baal.

- ¡Oh, Baal! Eras joven y te encontrabas triste y sin saber qué hacer y era que estabas solo y ahora ya no lo estás, ¡oh Baal! Magnífica o magnífico ha de ser quien te hace feliz, ¡oh Baal!

Mortal, lanzas tus alabanzas a sabiendas de que son molestas e inoportunas. Estaba solo y hallé consuelo. Pero soy Baal. Y, mortal, ya no soy joven. Todo puede pasar.

3 comentarios:

  1. La espiritualidad es parte del ser humano. Y hoy en día, como que "te miran mal" si tienes inquietudes de este tipo... El dinero, el sexo, y todo "lo tangible" en general, está sobrevalorado. Y es bastante limitado. El dinero se puede contar, es determinado. La metafísica, el alma, el infinito, el arte... Los chinos condenan la religión y cualquier forma de espiritualidad; hasta el arte si habla de algo que no les convenga. A mí, la propuesta de pensar sólo en ganar dinero y gastarlo para que la máquina funcione me parece una castración de las posibilidades infinitas del ser humano.

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  2. Madame Yolanda también tenía un día inspiradísimo. Oh, qué belleza para añadir a un texto sobre nuestro Baal!

    Feliz tarde

    Bisous

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