viernes, 29 de mayo de 2015

Vinieron o no vinieron

De entre todas las historias que fueron llegando a la convocatoria que hicimos, nos ha llamado la atención la que nos remite Alpert Depullienne con el título equívoco o equívoco título ‘Varios cuerpos’, que a continuación les presentamos, para todos ustedes.
‘Gracias a dios que puedo contar lo que me sucedió cuando fui a ver a mi amigo Lurensu Sham. La tarde caía lentamente sobre las calles de la ciudad y me dirigía sin rumbo, apesadumbrado porque había recibido una noticia lamentable. Mi amigo Lurensu Sham debía marcharse del país ya que su permiso de residencia había caducado y le obligaban a coger los bártulos e irse. Triste y apenado, me fui a verle. La tarde caía lentamente sobre las calles de la ciudad. Mis pasos se dirigían a casa de Lurensu Sham. Enfilé la avenida Indiana y fui a parar al portal que daba paso a unas escaleras que daban paso a un pasillo que embocaba a la puerta del domicilio de mi amigo Lurensu Sham. Y toqué a la puerta y me abrió Lurensu Sham. Mi amigo Lurensu Sham era un personaje algo oscuro y tristón que había venido de un país que nunca conseguía recordar y que había conocido yo en una de esas reuniones a las que voy para intentar encontrar algo de sentido en mi vida. Él era uno de los encargados del mantenimiento del local, vino a arreglar el Intenet, y cuando acabó su labor le pregunté, por seguir las indicaciones del curso, sobre su vida y sus andanzas. El curso pretendía que nos abriéramos al mundo, que hablásemos con la gente, que nos interesásemos por nuestros semejantes para enriquecernos a nosotros mismos. Le pregunté a Lurensu y hoscamente me contestó. Le pedí su teléfono para quedar otro día. Y fuimos viéndonos. Yo le preguntaba sobre su país, sobre su vida, sobre sus cosas, él contestaba lo que podía. No entendía mi idioma, yo tampoco el suyo. Todo suena muy raro. Lo sé. Pero así era. Lurensu Sham, pese a todo, no rehuía mi compañía y siempre tenía un momento para hablar conmigo. Estaba muy solo. Ahora se tenía que ir. Entré en su casa. Lo que me encontré no me lo esperaba. Nadie se espera que Lurensu Sham tuviera hermanos gemelos. Nadie se espera que dentro del domicilio, en principio minúsculo, de aquel inmigrante de apariencia hosca, pudieran vivir setenta personas. Lo más intrigante de todo era que todas las personas que estaban allí con Lurensu Sham eran Lurensu Sham. Eran todos iguales. Todos eran idénticos a Lurensu Sham. No eran familiares, no eran ‘parecidos’, eran él. Y Lurensu Sham me dijo que ‘me van a mandar de vuelta, pero aquí dejo a otros como yo, no podrán echarnos a todos’. Lo dijo en mi idioma. Perfectamente. Le pregunté si eran extraterrestres. No sé cómo se me ocurrió la pregunta, pero se la hice.
-          ¿Sois extraterrestres como en la película aquella en la que unos extraterrestres sustituían a la población terrícola y…?
-          Algo parecido.

Me invitaron a una especie de refresco hecho con frutos tropicales que bebí con cierta aprensión y como pude salí de aquel domicilio tan extraño. La calle caía en la tarde, perdón, con los nervios… la tarde caía lentamente sobre las calles de la ciudad. Al cabo de unos días me volví a encontrar con Lurensu Sham en el andén del metro y me quedé algo parado, porque me saludó y me preguntó por cómo me iba y tal y parecía que era el mismo Lurensu Sham y a veces pienso que la gente me toma el pelo y creen que soy tonto y a lo mejor tienen razón.’

jueves, 28 de mayo de 2015

En una comunidad, no muestres tu habilidad

De las memorias de Françoise Alligator, tituladas significativamente con el nombre 'Ni atado', extraemos este pasaje con el que el artista se define.
'Por afición, porque a cada uno le da por donde le da, porque con las manos unos desenroscan cosas y otros mueven elementos, a mí me dio por dibujar. Dibujar, coger el lápiz y en cualquier parte, en una servilleta, en un mantel, en una hoja de una libreta, mientras alguien hablaba o comentaba lo que fuera, yo iba haciendo mis garabatos, mis caras, mis composiciones, sin mayor pretensión. Mi madre me dijo siempre que eso de dibujar y pintar era una tontería, que me dedicase a hacer algo de provecho. El tópico. Mi padre, no decía ni sí, ni no, ni todo lo contrario. Miraba como dibujaba, y si le preguntaba algo decía 'bueno, pues no parece que sea ni malo ni bueno, no sé, eso tú sabrás que eres el que dibuja, pero el dibujo teniendo su forma y su semejanza con lo que se ve, pues no tiene por qué ser malo'. Yo dibujaba y lo hacía por divertirme. Me lo pasaba bien. Me sentaba en cualquier parte y dibujaba un árbol, a un señor recogiendo cartones, a tres abuelos paseando, la iglesia del pueblo, un bote de couldina, las tazas de café, lo que tuviera por delante. Todo por gusto. Un día, alguien, un amigo que empezaba a trabajar en una empresa de publicidad, me dijo que, con esa mano que tenía, a ver si podía hacerles un logo. Un algo. Otro día, fue un compañero del trabajo, que me pidió un logotipo para el sindicato. Al día siguiente, ya era una amiga de mi mujer la que me pedía el retrato de un niño muy guapo que había tenido ella misma. Al poco, ya era un señor de la escalera que se había enterado de que dibujaba y que pintaba y me venía con la foto de su pueblo, un precioso pueblo aragonés, para que le hiciera la composición adecuada para su salón. Un día, era el señor que se cruzaba conmigo todos los días en el bar donde desayunaba quien, a escondidas, me ofreció la fotografía antigua con la cara de una mujer de rostro vulgar, pero que, bisbiseando, me comentó que había sido 'una amiga muy querida' y quería inmortalizar su rostro. Luego vino el trabajo para la empresa de mi amigo. Luego llegó cuando en el sindicato me ofrecieron llevar la línea gráfica. Más tarde vinieron los retratos en serie de gatos, perros, amigos, amigas, directores de orquesta, miembros eméritos de la sociedad local. Incluso recuerdo el momento justo en el que se me ofreció la posibilidad de empezar a dar clases a niños y a otro tipo de seres humanos que querían pintar sin pasar por el espinoso asunto de aprender a dibujar. Y yo, que lo que quería era sentarme en una mesa y dibujar una paloma mientras me miraba uno u otro. Y yo, que lo que quería era, dibujar la cara de un señor que se parecía a otro señor y que podía ser cualquier señor, pero que en realidad era mi padre de diversas maneras, un día, dije que hasta ahí podía llegar la broma. Y no volví a hacer nada más por encargo de nadie porque no da la gana a mí. Y es que, en una comunidad, no muestres tu habilidad. Y esto es más o menos el resumen de todo, porque lo puedo contar todo y ahora que tengo un momento, te lo voy a contar.'

Francisco Molina. Él si que sabe contarlo bien..

miércoles, 27 de mayo de 2015

Ella/Él

Ibsan Logan, en su catálogo de aventureros 'Se mueven', recientemente reeditado, recoge el pensamiento un tanto difuso de un tal Lennox Mckernye, que nos permitimos reproducir a continuación:
'Yo pasaba las noches pensando en ella. En su olor. No me había dado cuenta de que ella olía de una determinada manera hasta que dejé de dormir con ella. La expedición había transcurrido con normalidad hasta llegar a un pequeño poblado Chispaloosa en el que pudimos descansar para emprender la ascensión al monte. Era la primera noche en la que podíamos domir con un poco de decencia, después de mucho caminar y trasegar y dormir de cualquier manera por miedo al ataque de alguna tribu hostil, que lo eran todas menos los amigos Chispaloosa. En mitad de la noche, me acordé de aquel olor. Digo que nunca lo había echado de menos, pero algo, no sé, me hizo recordar su olor. Y no me lo podía quitar de la cabeza. Y sentía su presencia y ella no estaba, porque la había dejado en Boston y porque no podía estar allí de ninguna de las maneras. Y me levanté desesperado, atenazado por miles de penamientos extraños. Y entonces me volví loco y me metí en la cama de Foherty. Y le abracé. Y aunque no olía como olía ella, al tener yo en mi cabeza y en mi olfato y no saber decir porqué lo tenía y conformarme con ello, encontré en Foherty un buen sustituto para abrazar, al menos a alguien y calmar así mi necesidad de abrazar. El olor ya lo tenía y sólo necesitaba una presencia con carne y huesos. El resto de la expedición lo pasé durmiendo con Foherty, que, sorprendentemente, nunca se enteró de nada. Al llegar a Boston, tras coronar el pico y darle mi nombre, me reencontré con ella. Y volví a dormir con ella. Y no sé porqué, ya no noté su olor. La vida es extrañísima como te pongas a darle vueltas a las cosas'.

martes, 26 de mayo de 2015

Miscelánea - El crepúsculo de los dioses

No sé cuántas veces habré podido utilizar imágenes de esta película. La señora Swanson que se cree joven y se niega a reconocer que ya está. Que ya no es. Hoy es mi cumpleaños, 40 años, lo mejor ha pasado ya. Seamos conscientes de nuestras limitaciones y aceptemos que lo que venga, será peor. Los Planetas tienen la canción de todos los cumpleaños. No será peor, seguro que es mejor. Cumpleaños Total. Este año, este tramo del 26 de mayo del año pasado al 26 de mayo, ha sido la ostia. Pero la ostia, de verdad. He sido tan y tan feliz como creo que nunca lo he sido. También lo he pasado mal. También lo he hecho pasar mal. Muy mal. He estado muy ahí y muy allí. Este tramo de 26 de mayo a 26 de mayo, será como sea, pero ya no será como este. Y si es parecido, vamos a llevarlo con el mismo humor. Y aunque juré que nunca más, vamos a escucharla otra vez. Un cancionón que siempre hay que escuchar en cualquier fiesta. Hoy daré una fiesta. No vendrá mucha gente, en mi piso no cabe casi nadie. Pero siempre podemos hacer algo.
https://www.youtube.com/watch?v=bxP9m9sA-tA

Ya que estamos, vamos a hacer un pequeño balance. El balance es complicado. A ver. Partamos de la base de que uno tiene la idea de que a partir de los 14 años, más o menos, todo lo que vino después ya no casaba con lo que uno es. No lo explico bien, o no me quiero explicar bien, porque no es una idea bonita de decir. Es decir, que a partir de los 14 años, todo lo demás, las decisiones importantes, subsistir en definitiva por mis propios medios, me viene grande. No me interesa. Competir. Luchar. Los retos. No me interesa. Me rindo pronto y no me creo el tema. Cualquier tema. Deambulando por esos campos del diablo, ahora algunos me consideran una persona estimable, un tío a tener en cuenta, una persona de ley incluso. No me conocen. No valgo para mucho. Dos o tres risas y poco más. 40 años y no hay nada detrás. El balance. 40 años y por dónde vas más o menos. Con lo mismo que tenía y con la misma poca perspectiva que con 14. El plan es que no hay plan. El ya clásico Happy Birthday de Jimi Hendrix junto a Curtis Knight.
https://www.youtube.com/watch?v=USip2Phpy60

No nos engañemos, lo que nos queda es ir a peor. De ahora en adelante, podemos disfrazarlo como queramos, pero esto no va a mejorar. 40 años. Si no lo hiciste 20, con 30, no lo harás con 40. Te queremos desear un feliz cumpleaños. La muerte no es el final. Puedo bajar las escaleras haciendo el número, pero esto ya no le interesa a nadie. Cuando yo tenía 20 años pensaba que el futuro, el presente mismamente, era una mierda. Ahora me doy cuenta de que estaba equivocado (suenan los violines y el cantante melódico mira a la cámara),  que el presente, al menos, había que vivirlo de otra manera. Pero eso se lo cuentas a otro, compañero. Tú, no. Tú, esto es decir, yo, ya sabía que esto era así. Que te ibas a dar cuenta tarde. Estamos de celebración, estamos de celebración, arriba los corazones. ¿Qué tenemos hasta ahora? Mucha gente que me felicita, que me aprecia, que me anima, pero me da la sensación de que llega tarde. Que me he perdido muchas cosas. Que lo que viene será peor. Qué sensación más rara. Happy birthday to you. Stevie Wonder pidiendo que el día del cumpleaños de Martin Luther King fuera fiesta nacional. Que el día de tu cumpleaños sea fiesta nacional. Que corten la calle. Prócer.
https://www.youtube.com/watch?v=FchMuPQOBwA

No tiene que ser peor, claro. Y no lo será porque todo es voluntad. El triunfo de la voluntad. Si lo piensas pasa, si quieres puedes, todo eso. No tiene porqué ser peor. Tengo 40 años. Casi nadie de mi edad es como yo. Los hay que han llegado a tocar la pared y han vuelto. Otros están el la recta vía. Otros están mal. Yo estoy como si conmigo no fuera la cosa. ¿Y...? Pues no. ¿Y...? Pues tampoco. ¿Y de...? Nada. La vida va pasando sin que haya un mojón sobre el que decir, pues esto es así. Va bien. Estoy bien. No estoy mal. Me duele mucho la rodilla y a veces creo que cojeo más de la cuenta. Me duele también lo de la ingle y me tiene jodido en ocasiones, pero eso tiene solución y la sanidad pública ayudará cuando lo considere ella. No sé qué más. Tengo 40 años y qué tiene uno que aportar. Qué ha dado. Muy poca cosa me parece. Demasiado ocupado no intentándolo nunca, no fuera a ser que se te viera el cartón. No voy, no me llames, no puedo ir, ya te digo yo algo, ya lo enviaré, ya lo haré. Oblomov. El puto síndrome de Oblomov. Ya lo haré, no sé hacerlo. 40 años. No puede ser que nos estemos quedando sin canciones de cumpleaños. Ahora que pienso, me viene la frase de la canción de Manolo García 'nunca el tiempo es perdido'. Cada vez que escucho a Manolo García me dan ganas de coger la escopeta. No te preocupes, mama, que voy a disfrutar el día. Esto es solo filfa. Escucha a Led Zeppelin y verás.
https://www.youtube.com/watch?v=KMQdiHIZgSo

Porque no está todo tan mal. Balance. El balance es la cantidad de gente que va conociendo uno y que está a gusto contigo. Eso no me lo esperaba. Yo era un tuso que ponía malas caras ante cualquier cosa que no le cuadrara. Que era incapaz de darle un beso a nadie, un abrazo, dirigirle la palabra a un desconocido, ser amable, alguien con quien contar para algo. Con lo cariñoso que eres, me dice la gente. Pues no. Era un tuso. Y creo que lo sigo siendo y me sorprende que haya gente que cuente comigo, que se ría conmigo, que me llame, que se preocupe. Incluso de vez en cuando, se escapa algún beso. 40 años. En cuanto a éxitos, mal. Pero es que desde los 14 años, uno tenía claro que éxitos iba a haber pocos. Si acaso, eso, la filfa. La cucamona. El parloteo. El chau chau. Ir rellenando huecos. Antonio Masilla. Y eso también se valora. Se da cuenta uno tarde, por eso, pero se valora. 40 años. Peter Hammill en su magnífico y punkoide Nadir's Big Chance tiene un cancionón llamado Birthday Special. Otro con cumpleaños chungos. 40 años. La mitad de la vida, siendo optimista. 40 años para intentar remediar el desastre de los 40 primeros. Estamos en ello. En los últimos años lo estoy intentando. Dios sabe que es duro hacerlo cuando no tienes la costumbre de ser... no sé.
https://www.youtube.com/watch?v=x3lsaeY6h6A

¿Es tu cumpleaños? Es mi cumpleaños también. 40 años. Los dos cumplimos 40 años el mismo día. No sé qué balance hará Fernando López. No sé. Creo que mucho mejor que el mío. Cuando nos vemos yo hablo y hablo y hablo. Me pasa con mucha gente. Hablo y hablo y hablo. Y mi madre se sorprende de que hable con tanta gente. Dice que le da envidia. Y se sorprende. Porque me conoce y sabe que yo no hablaba, que yo estaba en casa viendo la tele, que no bajaba al paseo a jugar, que no iba. Que no hacía nada. ¿Cumples años hoy? Yo también. Vamos a hacer una fiesta. Hoy voy a dar una fiesta, porque lo único que tengo es la gente. Un día vamos a quedar y vamos a ir... La música, la perra, el dvd. Lo mejor. No, en serio. Hoy quedamos en mi casa tanto el núcleo duro como el ejército regular y vamos por lo menos a echarnos unas risas. Y que le den viento a la circunstancia. ¿Es tu cumpleaños? Es mi cumpleaños también. Bueno. Hemos llegado a la de los Beatles. No la he puesto antes de salir de casa, como todos los años. Es mi cumpleaños también y vamos a ir a una fiesta. Esta canción, con el Abel, en el concierto de Paul Mccartney. Habría que hacer un recopilatorio de momentos estelares. Uno fue ese. Es mi cumpleaños.
https://www.youtube.com/watch?v=wNcJ3jYOQGg

Pues es esto. Que la primera parte ha llegado a su fin y que habrá que espabilar. La cosa ha terminado en alto, que también es importante. Podía haber ido espantosamente mal, pero creo que, el balance, finalmente, es bueno. Porque lo hemos terminado así, para arriba, no me estáis viendo pero ya me imagináis haciendo este gesto así con la mano. Para arriba. Esta noche hay fiesta en mi casa. No traigáis nada, que ya nos apañaremos con lo que haya.

lunes, 25 de mayo de 2015

Campaña electoral. Negación, negociación, depresión, Camprodón.

Bueno. Antes de que sea más tarde y de las flores se marchiten y de que los idus de marzo presagien la muerte de César, analicemos un poco lo que ha ocurrido, desde una perspectiva objetiva, sin dejarnos llevar por las emociones. Hagámoslo un poco al contrario de como se suele hacer, en caliente seamos reposados y con el tiempo Hezbolláh. Esta ha sido mi primera campaña electoral como miembro de una lista y...
- Y esperamos que sea la última. Porque si tantas ganas tenías de hacer cosas, te podías haber comprado un kit de bricolaje y haberte puesto con la terraza, que la tienes echa una linda mierda. Amigo. Qué vergüenza, pero qué vergüenza. Ya lo tenéis bien merecido, ya. Espero que no vuelvas nunca a presentarte ni a presidente de la escalera. Deshonras la memoria de tantos y tantos...
Pfff. En fin. Esta y otras lindezas son las que espera uno recibir durante estos días. Sí, amigos. La campaña electoral ha terminado con unos resultados que bueno, bueno. Para regocijo de los amantes de las encuestas, la del periódico de marras acertó y Nuria Parlón ha conseguido una mayoría absoluta consiguiendo nada menos que 2000 votos más en un escenario de aumento de la participación. Camprodón. ¿Yo esto cómo lo interpreto? Soy un colomense a punto de cumplir los 40 años. Cuando muchos de ustedes lean esto, ya tendré los 40 años. De hecho, es posible que a algunos les llegue este texto en un tiempo futuro y tendré yo entonces más de 40 años. Y las coordenadas que yo estoy trazando ahora serán otras y, quizás, el mundo sea distinto. Y yo rezo todos los días, cuando todos se acuestan y estoy solo, por que ese futuro, ese mañana de esperanza, llegue. A Santa Coloma. A otros sitios ya ha llegado a cuenta de meternos el rabo entre las piernas y apoyar, con armas y bagajes, el proyecto de cambio del que todo el mundo habla. Nosotros aquí no hemos hecho lo mismo, convencido estoy de que ha sido por culpa nuestra ya que lo dice tanta y tanta gente. Pero estábamos hablando de otra cosa. ¿Por qué? ¿Por qué aquí sí y en otros sitios el PSC es un producto residual o condenado a entenderse en condiciones de debilidad con otros? Ciudad diferente, Santa Coloma. Podría yo hacer teorías, teoremas, componer bellos versos a la Luna, pero me conformaré con decir que en Santa Coloma, lo que hace el Ajuntament, lo hace el PSC y que los demás podemos bajar de los 10 segundos en los 100m lisos que la gente estará convencida de que Nuria Parlón ha bajado de los 10 segundos en los 100m lisos. Eso es asín. Huertos hurbanos, perdón, urbanos, viña, acercar lo verde al cemento, etc., participación ciudadana, etc., todo eso, la presión por el gasto social, eso también. Pues da igual. Lo ha hecho el PSC. Y tontería que briegues que eso es así. Y no hay nada que hacer. O sí. Yo creo que sí. Habrá que seguir con la guaracha. Porque amigo mío, el roll es la madre del rock y también de la guaracha. Son las cosas de no saber con quién te juegas los cuartos. Y poca cosa más. Lo de Som, pues gol. Gol y cuando uno encaja una goleada en el partido de ida, pues se arremanga y se prepara para el partido de vuelta. Cambia el esquema, juega algo más abierto, quita un defensa, etc. Hay quien lleva 35 años esperando el partido de vuelta y ha llegado ayer. Elegante en la victoria, nosequé en la derrota. ¿Dónde está la papeleta de Podemos? Está aquí, es la que te dije. Así es. Y contra eso, nuevamente, poco podemos hacer. Porque, realmente, nadie viene preguntando por la confusa papeleta de GE-ICV-EUiA-E. Eso no pasa. La gente sabe quiénes somos. Som que no somos. Somos gente preparada -menos yo, cuidado-, gente currante -touché, nuevamente-, gente que estudia las propuestas, las explica, las habla, se trabaja los debates, sabe explicarse, se enfrenta de manera eficaz y elocuente al poder... pero eso a la gente, a nuestra gente, le viene a dar un poco igual. Me da la impresión de que no somos creíbles a la hora de decir 'vamos a mandarlo todo a la mierda'. Nosotros parecemos otra cosa. Otros pueden seguir viviendo de la rifa durante unos cuantos años todavía, nosotros ya no. Bien. Mejor. A correr.
Nosotros. El gran José Luis Centella, el camarada Secretario General del PCE, lo dijo el otro día en una cena, elitista, cupular, pantagruélica, de pipa y de Times, de monóculo y mayordomo. 'La culpa no es de otros, tenemos que mirarnos a nosotros y ver qué pasa, no mirar tanto fuera'. Eso es. Nosotros explicamos cosas, proponemos, nos movemos... ay. Nos movemos. Lo hemos petado en el barrio del Centro pero al parecer, en los barrios hemos patinado. Hemos perdido 1300 votos. Gracias por el dato. Ya me he enterado. Hemos perdido 1300 votos. Ya lo he visto. 1300 votos. Que sí. Y el PSC ha ganado 2000 y vosotros habéis perdido 1300. Que sí.
- Y más teníais que perder, que habéis abandonado la esencia del pensamiento del partido y os habéis convertido en unos secretarios, perdón, sectarios de mierda. En una gentuza que no guarda relación con una historia y unas siglas que tanto han dado al progreso de... Yo ya hace mucho que no os voto, pero una vez os voté y ya no lo hago porque sois...
Gracias por su consideración, compañero.
Una campaña electoral durante la cual he conocido a gente maravillosa que con un corazón que no les cabe en el pecho me han enseñado a patatín y patatán. Ellos saben quiénes son. Pero también me ha servido para conocer a gente que tenía mi foto en la parte de atrás del móvil pegada con celo, atiende nene, asombrados por mi monstruosa fealdad, debe ser. Y otra gente se ha interesado por mis textos de manera asombrosamente gentil, dedicándome bellas palabras de admiración y mostrándome, desde lo más profundo de su corazón, que el hombre, el ser humano en general, está lleno de pequeños rincones maravillosos que hacen que merezca la pena dedicarle cada mañana una bella sonrisa a la vida.
Qué caos de texto. ¿Qué hice ayer? Dolerme por esos mundos de dios. Recorrer Santa Coloma acompañando a la Sevilla (Sevilla, Sevilla, Sevilla), insuflando algo de ánimo a los compañeros, recibiendo más bien el ánimo que nos daban ellos, mirando los montones con congoja, recibiendo informaciones confusas. 'Aquí el PSC está muerto', 'lo está petando Som', 'el de Ciutadans en loor de multitudes'. Era todo falso. O real. Diálogos victorianos con los compañeros de Som, que elegantemente no nos pasaban demasiado la mano por la cara. ¿He hablado del partido de la extrema derecha? ¿No? Hablaré también. Si hace cuatro años la vergüenza nos hizo saltar los colores a los colomenses, parece que hemos echado algo de cabeza y hemos mandado a tomar viento a la extrema derecha, pese a que se han dejado un buen dinero en campaña y que el mensaje xenófobo ni mucho menos ha desaparecido de los discursos políticos e incluso ha sido adoptado por otros partidos. Y por mucha má gente. Ahora he adoptado un tono serio y luego volveré a hacer el chufla. Y ahora un rato de esto y ahora amago por aquí. Balón a la olla. En la sede de ICV vimos los resultados. Cuando llegué del recuento, desde el Torre Balldovina, ya sabíamos más o menos lo que había. Abrazos con los compañeros, aplausos, emoción, dolor de barriga, bocadillito de salchichón, xibeca y vino. Oye, pues ningún drama, que hay que levantar la moral de la tropa y ver qué podemos hacer... podemos. Es que no. Es que no te lo quitas de encima ni aunque quieras. Y no habrá ninguno de los nuestros nuestros en el consistorio, porque sólo hemos sacado dos y... bueno, vale, sí. Ya. Que bueno. Y así como en la lejanía escucho hoy decir que la vencedora de los comicios municipales ofrece un acuerdo de gobierno con algún partido de izquierda... y se me eriza el vello, el bello vello que tengo en el cuello, y el bigote se me electrifica, y pienso que al final es todo una broma y que de lo que se trata es de que nos vayamos a casa, nos compremos una play y juguemos una partidica interminable al Fifa, mientras los niños grandes se ocupan de las cosas de comer.
¿Qué nos queda? Pues miren al muchacho de la foto. El harekrishna de la revuelta global. Ahora yo podría hacerme el harakiri aquí mismo, tirarme a la vía del tren si Santa Coloma tuviera tren, tirarme a la vía del metro, que sí que tenemos metro, podría inmolarme en la plaza Mediterrània, pero no va a pasar. Porque prefiero no morirme. Prefiero, ahora que el escenari es adverso y que la cosa pinta áspera, hacer por vivir.
'¿Cuánto habéis sacado?', nos han preguntado hoy. 2, hemos contestado. Bueno, pues nada, adelante y mucha fuerza. Y mucho ánimo. Y quedan cuatro años. La vida. La elegancia. La prestancia del colegio de pago. Yo fui a un colegio de pago. Ayer me encontré con un exalumno como yo. Dos exalumnos. Uno de Som y otro de CIU. Y yo. Tres. Y Belén Torres de informadora. Dominaremos el mundo, algún día. Desde nuestro bagaje de colegio de pago.
- Niño, felicita a los campeones.
- ¡No!
- ¡¡Que felicites a los campeones, niño!!
- ¡No!
- ¡¿¿Pero bueno??!
- ¡Que no!
Este es el plan. Estos son mis referentes. No sé cómo acabar el texto. Es un recurso estilístico. 'No sé cómo acabar el texto'. En plan víctima. Jo, tío. Esto no se lo va a leer nadie. Pero yo me voy a quedar más a gusto que Dios. Crónica del día de ayer: vi la luz al final del túnel y la dama que me decía 'ven', pero luego mejor. Estoy mejor.

jueves, 21 de mayo de 2015

Campaña electoral. Días 13 y 14. Triquiñaqui


Tu nombre ha vuelto a sonar. Trikiñaki. Triquiñaqui. Anda que no he llorado yo nada por no querer ir al triquiñaqui. Años ochenta, Santa Coloma, verano. Los niños podían ir a una especie de esplai de verano para socializarse y dejar a las madres un poco a su aire… pues no. A mí no me llevan al triquiñaqui ni atado. Y mi madre que sí, año tras año. Y yo que no. Y a llorar. Y porqué no te apuntas si va el tal y el cual, y yo que no, que no voy. Que no quiero ir. Y a llorar. Triquiñaqui. Me cago en el copón colorado. Acto de educación organizado por la formación y una maestra habla de los tiempos pasados y dice que podríamos recuperar espacios como el Triquiñaqui. Y me he acordado y tu nombre ha vuelto a sonar. Qué tiempos. Ahora ya casi no lloro nunca. Dos días de campaña y queda un día de campaña. Día de ayer. Más frío que en Copenhague. Vamos a la Ramon Berenguer y la prensa, pese a ser el partido, o la formación, o lo que quiera que sea que seamos, todavía viene a nuestras convocatorias. Vamos a denunciar que hay una residencia de ancianos que tiene unas pocas plantas cerradas y que parece que bueno, son cosas que pasan. Y hay que preparar el debate. Yo no puedo hablar mucho del debate porque apenas estuve pendiente, porque nos lo pasamos de puta madre con los móviles, los colegas, mis nuevos amigos, con los tweets y las cosas. Yo antes tenía otros amigos, que espero recuperar el 25 de mayo. Los colegas de ahora, agotamos las baterías de los móviles en un momento, en un nada, así. Antes molaba. Del debate poco tengo que decir, tendrán que esperar a la crónica de Nadio Teins. Vuelco electoral. No sé. Yo creo que somos el niño repelente ese que lo sabe todo y al que todo el mundo quiere ver caerse para reírse de él. Un poco así. Nosotros somos los listos. Los que en el insti sacaban buenas notas, los nerds, los que no hacían gimnasia. Y está todo el mundo queriendo ver cómo se caen. Un niño que corre y se cae. Un niño que sabe que está corriendo para caerse. Con las rodillas llenas de costras, porque se ha caído ya otras veces antes, pero aún así, sale a correr, a jugar con otros niños y se cae. Y llora. Somos ese niño que se cae. Pero nosotros sabemos quiénes somos y lo decimos. Somos los listos. Otros van diciendo que una gente que hace tiempo que ya nadie recuerda porque ya no salen en la tele está en su espíritu. Esta crónica debía llamarse manitú. Espera, ven un momento, me molas. Me molas porque no me molestas. Me gustas porque tienes tu espacio. Me encantas porque no me haces caso. Me chiflas porque pasas de mí. Te quiero conmigo, porque me dejas hacer lo que quiero. Ven, que ha acabado el debate y quiero hablar contigo. Ven, que te quiero ver sonreír. Ven, que me gusta ver que no me quieres y estás nada más que callado ahí en un rincón y me he dado cuenta de que eres tú. Te amo. Te amo porque me dejas hacer lo que me da la gana. Que tú te entretienes con tus cosas y tus movidas y tus rollos y me dejas en paz. Qué gusto haberte podido conocer pudiendo haberte conocido siempre. Te amo. No me mires. Bésame. Otra vez. Horta de sant Joan. Al día siguiente vamos a la plaza del Reloj y un señor me dice que es de izquierda unida, que estuvo en la cárcel, que era de la joven guardia roja, que era amigo de Luis. Hay tantos amigos de Luis. Que siga. Buena acogida. Viene Laia Ortiz, que es de Iniciativa, pero es de Barcelona en comú y vosotros no. Vosotros sumáis para la candidatura Poble Actiu, que es la marca de la CUP. Porque si vamos a decirlo todo, vamos a decirlo todo. Y ser de la CUP no es malo. Ser de la CUP es ser como haber sido de los nuestros. Como tanta gente. Es un paso. Sigamos. Laia Ortiz viene a lomos de una brompton, que es una bici de esas chicas, de las que das una pedalada y avanzas mil metros. En fin. Hacía calor. Comer, ir a Can Calvet a ver qué y vemos qué y resulta que el tema de la inmigración escuece. Y uno explica su visión y no parece que case demasiado. No liga. Es raro. Nos vamos. Acto de educación. Triquiñaqui. Y nos vamos y volvemos al sitio donde se cuece la broma y nos encontramos con la prensa, con el rocanrol, con el establishment. Antes, la gente molona y bien, votaba una cosa. Ahora quiere votar otra. Nosotros somos los de los bolis en el bolsillo de la camisa. Pero en los vídeos, cristina aguilera se enamora del nerd. O es Mariah Carey. No recuerdo. Falta un día. Un día y ya lo dejamos. Un día para el último dron. No digo que me encuentro con una carpa de ciutadans al lado del Seimar. Lo lleváis claro, que los del Seimar somos gente de orden. Que no arriesga. Me he encontrado esta mañana con Gemma Gironés, a la que no veía desde los cinco años, creo. A la Mónica Solares le di un papelito el lunes. Soy yo. No nos vemos desde octavo. Pero que Gemma Gironés se acuerde de mí… en fin. Qué mundo. No sé qué más tengo en el tintero. Lo voy mirando. Marga Dordella diciendo que después de esto hay más cosas. Que la vida es más que esto. Yo soy de izquierda unida y esto no lo diré jamás en público, pero Marga Dordella, es mucho. Supongo que será casta o pequeña burguesía, pero es mucho. Estoy ahí.

martes, 19 de mayo de 2015

Campaña electoral. Días 9, 10, 11, 12 y 13. El hombre que pudo matar a Joan de la Vega

Y yo vi cómo nuestros globos verdes volaban voluntariosos y se encontraban en el camino con una formación de globos bien uniformados que les cerraron el paso en el aire. El aire no es de nadie y es de todos y yo he visto y no lo he visto porque me lo han contado que uno de estos días nuestra carpa se volaba. Y yo he visto balones de colores y gente con bolsas. Y yo he visto el suelo lleno de balones y de niños felices que jugaban con ellos en el césped. El césped del río que es de todos. Y yo he escuchado en una peluquería, early in the morning, alabar a ese muchacho tan bueno que habla en la tele que dicen que van a pasar de tres a trece. Eso no fue el día ocho, o el siete. Ya no recuerdo. Yo he visto estado el viernes por la mañana repartiendo revistas en Santa Rosa y poner cara de ahá mientras me decían que a Nuria Fergó no la iban a votar. Y uno dice, ahá. Y yo me he tomado un cortado con el Copi a ritmo de Tijeritas, mientras los tres de Palacagüina movíamos la cabeza así. Yo he sufrido un dolor de narices y he seguido en pie, y a veces también he seguido sentado mientras la gente en Santa Rosa nos explicaba viejas historias del PSUC. Yo he escuchado una voz gutural decirme ‘gélido, gélido, vente al lado oscuro y engorda’. Yo he escuchado voces decir que tengo retórica. Yo he visto un incendio de cerca. Yo he visto cómo se transfiguran las caras de la gente cuando el incendio está ahí y la responsabilidad asoma. Yo he visto a los Chochos en concierto y todavía nos estamos preguntando, desde el respeto que como músicos nos debemos tener unos a los otros, qué narices toca el Miguel del Xocala. Yo he visto de cerca a los miembros de Barcelona en Comú y son como nosotros. Son nosotros. Yo he visto carteles preciosos, hechos con dineros, carteles del stablishment colomense, que sabes quiénes son y a dónde van. Yo he visto al stablishment del pan con chocolate hacer preguntas sobre si somos o no somos, sobre si haremos lo que todos nos dicen que no debemos hacer y que a todos los del stablishment les interesa. Yo he visto a los Chochos y todavía no recuerdo haber bailado. Yo recuerdo haber bailado rock con un poeta. Yo recuerdo haber estado a punto de cargarme a un poeta. Yo recuerdo, como si fuera ahora mismo, haber tenido a un poeta entre mis piernas. Yo podría haber matado a Joan de la Vega. Yo soy Antonio Molina, El magnánimo. Yo recuerdo haber opinado mucho y bien sobre la fealdad. Sobre la fealdad de uno mismo. Sobre lo feo que recuerdo haber sido siempre. Yo recuerdo haber sido una persona con la autoestima muy baja, siempre. Recuerdo, como si fuera ahora mismo, haber asistido a un recital de Nelson Poblete y de José Luis Lozano y debo estar en una fase muy tonta de mi vida, porque me está empezando a gustar todo. Yo no sé por qué día voy. Yo recuerdo haber estado, como en un sueño, en el Fondo. Yo recuerdo haber repartido y repartido centenares de revistas. Y recuerdo una camisa blanca. Y recuerdo un sol de justicia. Y recuerdo bolsas azules en lugar de rojas. Y recuerdo haber empezado a usar lo de ‘un papelito de la competencia’, para entregar los panfletos. Panfleto. Y recuerdo haber escuchado en una emisora local decir que los pactos se decidirían en asamblea. Y no era la voz melodiosa y agradable de nuestra candidata, que era la voz recia del candidato de quienes nos relegaron al rincón de la historia por haber dicho que nosotros los pactos los decidíamos en asamblea. Y debe ser cosa de convertirse en Stablishment. Y recuerdo como si los hubiera visto hoy mismo, carteles de una formación nueva y novedosa, que puede hacer lo que quiera, apostar por una coalición de partidos como la nuestra pero que no es la nuestra. Y luego todos somos amigos y si pasa su coche nos saludamos y todo mola, pero yo me acuerdo de las cosas, porque todavía no tengo los cuarenta y me funciona la retentiva. Y yo he hablado con el Angel de bambas, porque nos gusta hablar de bambas y de cosas así superficiales, entre comunistas y socialdemócratas, unas bambas muy guapas verdes y amarillas, que no casan bien los colores pero da lo mismo, que le han costado 55 euros en el Maraton. Y nos hacemos fotos de bambas como para enseñarlas luego, pero da igual. Total. A mí no me lee nadie y no voy a publicar nunca nada, porque he estado a punto de matar a un poeta. Y yo he estado delante de un secretario general y como cúpula que soy, le he dicho que yo ‘me hago el comunista’ a veces. Y espero que la gente se ría y no se ríe. Porque no hace gracia. Y yo recuerdo haber estado en un parque, allí arriba en las Oliveras, la placeta de las Oliveras, reivindicando algo que ya había subido a solucionar el día de antes quien ya manda en la ciudad en el siguiente mandato. Y yo he escuchado las preguntas y deciden por nosotros. Y nosotros no decimos una casa y luego es un pato. Esto lo he escrito porque ya no quiero escribir más. Porque escribo muy bien y abuso. Porque hace mucho que no escribo y cuento cosas cuando lo que me gustaría hacer es un vídeo. Yo salgo corriendo desde el fondo, llego al primer plano y me presento, la cámara se gira y sale la candidata y dice que nos voten. Yo creo que mola. Y yo he estado tocando balón por la mañana y viendo a Iñaki Williams marcar un golete molón por la tarde noche. Y he ido al día siguiente a una carpa en la Rambla Sant Sebastià y hablar en el paralelo 35 con los del equipo naranja y no llegar a ningún acuerdo. Y no me quiero enfadar y yo pensaba que los partidos nuevos y los viejos no tenían nada que ver y resulta que los partidos nuevos forman coaliciones, pactan y ya veremos, o bien se ufanan de no haber ido a una reunión y no saber exactamente, pero te la suelto igual y yo me río y tú te ríes y te he hecho una entrevista blandita pero no pasa nada, tocándola, muévela en el centro del campo, así atrás, asegura, empezamos otra vez.

Hola, soy el Toni, estoy hoy pasando frío en Singuerlin porque hoy toca Singuerlin y Chamizo nos dice que pone una pegatina de la virgencita en el poste de la luz y así cuando se toma la cervecita dice, mírala. Y ahí está. Y repartimos más y más panfletos de propaganda. Ya tengo vuestro papel, sois los comunistas. A ver cómo le explico yo a este señor… y yo he estado en una plaza escuchando al Centella y a los de Movistar. No a un tío haciéndose el Movistar, no. A los de Movistar. Y hemos tomado el mando de la coalición, con las llaves en la mano. Hemos conseguido la vieja aspiración del partido, volver a la unidad. Por primera vez nos han dejado las llaves del local. Es el principio. La unidad. Unidos. Ahora sí que no tenéis nada que hacer, gente del stablishment de los carteles bien hechitos y las infos molonguis. Ahora sí. Y yo no escribía así. Que yo antes me lo pasaba bien y no estaba pendiente de las cosas. Pero es que me he cohibido mucho. Estoy muy flojo. Escribo cada vez más flojo. Flojo, fuerte. Y esa voz diciéndome, ‘gélido, gélido, pásate al lado oscuro, que escribes muy bien’. Me asusto. Me asusto de pensar. Porque soy muy asustadizo. Y mañana nos toca en… no sé. Creo que nos toca por Riera Alta. Y no mola que decidan por uno. Nosotros no somos vosotros. Eso debería haber quedado claro antes. Nosotros no somos vosotros. No somos. Estamos. Hacemos. Y nos lo curramos un huevo. Y vamos a liarla parda el 24. Aunque llueva. Porque tenemos a gente como el Gabriel que es un fenómeno que se come una reunión y descubre a propios y extraños que hay cosas en Santa Coloma que no conocen hasta que se las dice él. O a la Joe, que vale más que un sol. O a la Africa, que se empeña en combinar el verde y el amarillo. Y no puede ser. Ahora en serio. ¿Qué toca Miguel con los Chochos? Yo recuerdo haber podido matar a un poeta y no lo hice. Pero lo llevo bien. Estoy en plena forma. 

viernes, 15 de mayo de 2015

Campaña electoral. Día 7. Me sé un camino

Lo contaba ayer mismo por la mañana. Yo de pequeño, creo que como todos, decía eso de 'me sé un camino'. Si había que ir a algun sitio yo me sabía un camino más corto, mejor. Un camino más bonito o un camino que 'me había inventado yo'. El día de ayer fue muy intenso. Muy intenso de verdad. Comenzó la cosa yendo por tiendas y peluquerías de nuestra hermosa ciudad. Uno es de natural retraído y le cuesta presentarse, pero se hace y la gente pregunta y acaba contándote que ellos lo ven y que estamos ahí y que la cosa va para delante. Así es. Se lo crean o no, la gente de la calle nos dice que vamos bien. Se lo crean o no, la cosa va para delante y no piensa recular. Al pasar por la plaça de la Vila, estaban los chavales del Sepc. Junto a ellos miembros de otras candidaturas. Nos pasamos a saludar. Nosotros. Estuvimos allí un rato. Éramos nosotros. Hola. Somos nosotros. Los que estuvimos también allí. Pero en la bibliografía no aparecemos. Porque nosotros no estamos allí. Bocadillo de chocolate. Yo, de pequeño, no podía comer chocolate, porque me picaban los ojos. Mi madre me lo prohibía y estuve toda la infancia sin poder comer nocillas, bollicaos, etc. Cada vez que se me concedía la oportunidad, era lo más de lo más. El chocolate. Un bocadillo de chocolate. Qué bonita comunión entre pan y chocolate. El pan, las rosas, el chocolate. Una unión sagrada en lo universal. Hoy aquí y mañana allí. Siempre en el mismo sitio. Después de saludar y departir amigablemente, seguimos con nuestras cosas, nuestras carpas y nuestra campaña electoral. Campaña en Singuerlin, en el Parque Europa primero y luego en la Biblioteca. Yendo hacia allí, vemos a dos candidatos de la ultraderecha intentando convencer a unos señores mayores. El día de antes, Xavi Navarro, el que fuera guitarra de los Mr.Monk, tuvo un temita con los miembros de la ultraderecha local. Contra los fachas no hay color posible, amigos. Ellos son el verdadero problema de esta ciudad. Sobre esto no creo que hayas dudas. En la encuesta dicen que salen con uno... ¿He dicho encuesta?
Justo al lado de donde están ellos, hay un puesto de los testigos de jehová, que casualmente estos días están como muy activos y muy visibles. Ahora tocaría una broma sobre papeletas y tal... pero para qué. Un poquito más adelante, ya están recogiendo los de Ciutadans. Y nosotros en la otra acera. Por la tarde, una amigable conversación con el Wallace y antes de eso un momento de 'es la de la foto, pero se ríe y en la foto no se ríe', con los niños de los colegios colindantes. No diremos cuáles porque la gente es muy susceptible y no es cuestión de molestar a nadie más.
La cosa repartiendo está bien. Hay quien ya te dice que tiene el voto preparado y eso te da una alegría tremenda.
La encuesta.
Por la noche. La encuesta. Puedes ver mi cara en el facebook, la cara de popeye, al cara de 'no puedes dejar de hacer el monguer ni aquí'. También hay vídeo. Eltoni haciendo un vídeo. Si malo es en las fotos, qué puede pasar en un vídeo. En fin. Pero el mensaje es sincero. De donde creció la palma.
Oye. La encuesta. Que muy bien. Pero que por nosotros no va a quedar.
Karpov aguanta siempre.
Y además, me sé un camino.

jueves, 14 de mayo de 2015

Campaña electoral. Día 6. Sófocles



El día de ayer fue un poco así. Comí lo siguiente: Ensalada cherry con nosequé y solomillo de cerdo muy bueno en un restaurante muy así de una calle muy así de la ciudad vecina que también es muy así. Todo muy así. Ayer por la mañana tocó cumplir con los compromisos contraídos y hacer lo que se tiene que hacer. Comí eso que he dicho que comí y luego comenzó la tarde de lucha. Ahí estamos. Acto de mujeres, me quedé en la puerta y no entré. Porque era un acto de mujeres y la coalición y la gentdesquerres hicimos un acto para que las mujeres, de la coalición y de gentdesquerres o no, que también las hubo, dieran su visión de lo que tiene que ser la ciudad. Me fui a la carpa. Enamorats. Plaça dels Enamorats. Qué cosa tan bonita de nombre para una plaza y qué primor de plaza. Una tarde con el compañero Àngel Pla y nuestro falso Urtasun, el Lexan. Discusión sobre si es la mejor calle de Santa Coloma para vivir. Conversación sobre si es la calle ás tranquila y con menos ruido y con mejores vistas. Ole. Conversación sobre bambas guapas, donde, ineludiblemente, ganan las Munich. De lejos. Conversación sobre himnos varios, Joven Guardia, el himno nacional de Chile, frontispicios en el escudo de Chile, lema en la bandera de Brasil, y finalmente cantos varios sobre Roberto Carlos y Andrés Calamaro. Todo eso, con los papeles en la mano dándole folletos a lo que se moviera. Al sol. Me pica la nariz, me escuece el cuello y lo que te dije me molesta como si fuera el mismo demonio lo que tuviera ahí. No me veas. Tanto rato de pie. Mucho. Pero todo por la causa. Tenemos las chapas y me pongo las chapas. Poca cosa que contar sobre la gente que recoge los papeles. Miran el folleto y miran la cara de la Ale y cogen el folleto. Se lo quedan. No todo el mundo. Un chaval con una melena que le llegaba a los pies nos mira con cara de 'qué pelotas hacéis dándome un papel si tengo una melena que me llega a los pies'. Pues por eso mismo, compañero, por eso mismo, porque eres un joven rebelde que debe cambiar el mundo y seguro que ya tienes 18 años y ya puedes votar, tengas melena o no. Un señor con una camiseta de Depeche Mode ni nos mira. Pero ni inmutarse. 'Para las elecciones municipales'. Ni caso. Bueno. A las siete y con el sofocón recogemos la carpa y nos vamos yendo. El acto de las mujeres todavía no ha acabado. Hay fotos y eso, pero no estamos aquí para ir pasando la mano por la cara a nadie. Este es un espacio en el que el respeto y la moderación van a ir ganando terreno poco a poco, cueste lo que cueste.
Hola. Me llamo Antonio Molina, no me conocéis porque he salido poco y me he movido menos. Me veréis en los carteles mirando también al horizonte como si vislumbrase así a lo lejos un porvenir de luz y energía infinitas. Pero qué va, miro al horizonte porque soy incapaz de mantener la compostura. Y es lo que hay. No temáis. Acaba el acto de las mujeres y es el momento de descansar y tomar algo tranquilamente. Como digo, no me conoce nadie. Tengo que presentarme y hay mucha gente que no sabe que soy de EUiA. Otros sí. Pero la mayoría no. Al parecer la gente está como difusa, está como dispersa. Mucha gente no tiene claro el qué. Hay que variar el tono: varío el tono para alcanzar a los indecisos.
Santa Coloma es una ciudad maravillosa llena de gente estupenda que es la alegría del Área Metropolitana y somos capaces de todo si nos lo proponemos. Porque Santa Coloma es una ciudad que es más bonita que un sol y sus habitantes están muy contentos y lo que tenemos que hacer es seguir manteniendo contentos a los colomenses y las colomenses. Estar contento es muy importante en Santa Coloma. Yo he decidido estar contento para estar contento con los colomenses y las colomenses de bien. Que son la mayoría de los colomenses. Yo no quiero limpiar Santa Coloma, yo quiero una Santa Perpetua, perdón, Santa Coloma, que esté a la altura de las mejores ciudades imperiales del cosmos supragaláctico. Yo lo que quiero es una Santa Coloma donde todos los ciudadanos y ciudadanas tengan su bocadillo de algo en una plaza a la hora convenida, compañeros. Yo lo que quiero es un chocolate ahora que empiezan los sófocles del verano. Yo he perdido el norte y antes yo pensaba que hacía gracia y que nadie era capaz de entender los textos y qué va. Me coge todo el mundo. Bueno. Pues nada. Que vamos haciendo. Que hoy a esta hora, ya hemos hecho cosas, pero no las puedo contar porque el texto no es de hoy.
Ah, ayer por la noche acabamos comiéndonos unos algo con uno de un restaurante que dicen que se come muy bien y que estaba muy lejos y ahora está lejos pero menos lejos. Y dicen que se sigue comiendo bien. Fantástico. Un hombre muy majo. Ayer todo el mundo era muy majo con nosotros. No nos conocen. Si nos conocieran como nos conocen otros, madre mía.
Voy a ver si me matriculo en un Erasmus o algo para seguir haciendo el mal. No dejen de venir hoy por Singuerlín y eso, y nos vemos y comentamos las bambas que llevamos. Llevo las mismas de ayer. Una pena.
Voy a poner la etiqueta 'periodismo' en el texto, para darme pisto. Pero no pasa nada, podéis leerlo igual. Os dejo.

miércoles, 13 de mayo de 2015

El día más feliz de la historia de la Humanidad

Hay días que no, pero hay días que sí. Recogemos un texto, casi a salto de mata y porque nos ha llamado mucho, mucho la atención que alguien haya conseguido registrar un momento así y que haya pasado tan desapercibido. En fin.
'Reunidos en la ciudad de Jerber los integrantes del Consejo Mundial de Expertos en Cosas Bonitas* con el único objeto de dilucidar de una vez para siempre, cuál es el momento en el que la HUmanidad ha alcanzado en su conjunto el grado máximo de felicidad y de comunión completa con el Cosmos, se produjeron intensos debates que no llegaron, como ya podemos columbrar, a ningún puerto, ni bueno ni malo. Los testimonios y las pruebas, algunas muy convincentes y otras más o menos sacadas de la manga, se iban sucediendo y ninguno de los integrantes del Consejo Mundial conseguía convencer a sus homólogos sobre qué y cuándo y en qué consistía. Uno de los integrantes de dicho Consejo era un miembro díscolo del mismo. Ernie Third llevaba una vida algo extraña. Sí que era miembro del Consejo, pero no había renovado el carnet, había dejado prácticamente de acudir a las reuniones, se le veía muy poco, andaba siempre perdido, estaba en otros asuntos. Algunos miembros del Consejo no dudaban en reclamar su expulsión. Otros, esperaban una explicación de Ernie Third, porque le seguían teniendo en cierta estima. Sea como sea, aquel día, enterado del asunto que se trataba, Ernie Third acudió a Jerber para contar su caso y proclamar a todas luces que él, y sólo él, tenía la solución al dilema presentado. Que no era tal dilema, que era un reto y un asunto y los asuntos y los retos se arreglan de maneras, a veces, insospechadas. Así contó Ernie Thrid lo que contó 'sin duda, no pestañeo ni esto, miren mi cara porque es la misma cara que tenía entonces y muchos se sorprenden, todos la verdad, cuando me ven llegar a los sitios, porque es la misma cara que mantengo y aunque a vosotros, infelices, os llegara la ola unos instantes, a mí me dura. Y no es que me dure porque me diera fuerte, si no que vivo en la felicidad más enorme que ser humano pueda vivir. Porque yo lo ví y yo lo sentí. Eso es lo que pasa. Que estaba allí mismo. Y lo recibí todo. Y si acaso alguien tuviera dudas de lo que esto significa, aquí estoy para volverlo a contar. Porque contarlo no es vivirlo, claro. Eso lo sabe todo el mundo, pero contarlo es ser feliz otra vez. Porque yo soy feliz desde entonces y esa felicidad ya no se lleva, es una felicidad de otro tiempo, que les pasa a otros. Otros que son diferentes de nosotros y ya no están en este plano, no son de carne y hueso. Soy una persona que ya no es la que era. A veces pienso que tampoco estoy en mi carne ni en mi hueso, desde ese mismo día. Es el día más feliz de la historia de la Humanidad. Y se lo cuento otra vez si quieren, porque no sé si lo he contado ya, porque en mi cabeza está siempre ese momento y a veces hablo sólo y no sé si lo cuento o no lo cuento. Lo cuento ahora. En forma oral. Y cierro los ojos y aún lo veo. Yo la ví bajarse del tren. Yo sabía que vendría en tren. Lo sabía. Pero no me imaginaba que podría ser así. Podía adivinar, así como si lo soñase, que podría ser así de maravilloso. Pero no así. Maravilloso. Esa palabra. Palabras que yo antes no decía y ahora voy soltando. Palabras que ella dice. No me doy cuenta. O sí. Decir sus palabras es otra vez verla bajar del tren. Ella bajando del tren y riéndose. Ese momento. Ese momento es el momento. El momento en el que ella se baja del tren y me ve en el andén y se alegra de verme. Ojo. Ese es el momento. Ese. Anoten. Ese momento en el que ella, baja del tren, salta el escalón, va avanzando por el andén, con la risa esa que tiene cuando se ríe y está contenta y viene hacia mí y se alegra de verme. Es ese el momento. Si lo revivo muy fuerte, puede ser que noten que algo pasa. Siempre pasa. A mí me está pasando ahora. Es acordarme de ese momento, a veces, siempre, es acordarme de la risa esa que tiene y cuesta discernir si ese es realmente el momento más feliz de la historia de la Humanidad, porque puede ser que sea ahora mismo otra vez. No puede serlo, claro, porque ella no está aquí ahora, pero sí que está presente el recuerdo de su risa. Una risa y una sonrisa. Siempre presente. Debería verla todo el mundo reirse. Yo he visto esa risa en el andén viniendo hacia donde yo estaba y yo no recuerdo si caminaba yo hacia ella o no. Desde ese día ya no hay otra cosa. Suena espeluznante, amigos, pero no hay nada más. Es esa risa. Intentar que no pierda esa risa, nunca. Hay días en los que yo me pierdo. La risa. Ese momento. Verla, radiante, feliz, bajarse del tren, riéndose, contenta porque estaba allí. Eso. La risa. Hagan lo posible porque esa risa no se vaya. Porque dudo bastante que esto, todo esto, el tinglado este que llamamos universo o mundo o lo que quiera que sea, pueda avanzar lo más mínimo sin el concurso, sin el recuerdo, sin lo que sea, de su risa. De ella. Que esté contenta, que esté feliz, porque sin eso esto no va a ninguna parte. Yo lo intento, lo intento de verdad. Hagan algo por esa risa. Ya sé que lo hacen, pero que no se les olvide. Sin esa risa, no hay nada. Qué feliz. Qué feliz, madre'. Y Ernie Thrid abandonó la estancia y no esperó a que nadie dijera nada, porque como dice la placa que recoge aquel día, el día más feliz de la historia de la Humanidad, ya estaba designado y el Consejo Mundial de Expertos en Cosas Bonitas sufrió muchos cambios. Muchos cambios. Y se dedicaron a buscar maneras de preservar la risa de aquella que una vez Ernie Thrid vio bajarse del tren. Con esa risa.'

Perdón por el retraso, A. Cinco días después. Feliz 8 de mayo. 

Gracias, Rayo Volador

Del manuscrito de Le Zi.
Un día, de hace mucho tiempo. Puede ser que la presentación no sea correcta. Hace mucho tiempo, ocurrió que un día. Una vez. Mejor empezar por una vez. Una vez, hace mucho tiempo. Alguien fue a un lugar y se encontró con que ya había alguien que había estado allí. Tuvo una sensación extraña. En ese lugar ya existían personas y estas personas construyeron edificios y cocinaban alimentos. Esas personas tenían idiomas y costumbres. Esas personas ya existían y cuando ese alguien fue a ese lugar, aún sabiendo que en ese lugar ya había gente y que él no era, ni mucho menos, especial, otro alguien ya había estado allí. Ese alguien había dejado huella, porque se había decretado, según le contaron, que no había nadie más. A este alguien que visitaba el lugar, le pareció desmedido que alguien que hubiera estado allí antes tuviera tanto poder como para borrar de la mente de esos habitantes de ese lugar la posibilidad de que nadie más pudiera quedar en su recuerdo. Él mismo, sería olvidado. Nunca estuviste allí. Porque otro alguien ya estuvo. Y como ese alguien, no habrá nadie nunca jamás. Intentó este primer alguien averiguar quién era ese primer alguien y último alguien que les visitó y que tan fuerte impresión les causó. Una joven del lugar, se acercó al personaje en cuestión y le contó que no era de allí, que venía de lejos, que se hacía llamar Rayo Volador y que sabían que volvería, no a redimirles de nada, no a salvarles de algo, ellos estaban bien. Simplemente volvería a verles, a preguntar, a dormir en una cama dura, a comer su comida, a reirse y a enfadarse. A estar. Sólo con eso. Todos convinieron que la visita del Rayo Volador había sido trascendente. Nadie más podría llegar a igualar eso. El primer alguien, asintió y se marchó entendiendo que, algo tenía que tener Rayo Volador para ser tan importante. Y decidió dedicar sus días a encontrarla. En el lugar le dijeron 'no eres el primero, pero si la ves, dale las gracias'. Al salir del lugar, alguien había escrito 'gracias, Rayo Volador'.

Feliz día YPRH.

martes, 12 de mayo de 2015

Campaña electoral. Día 5. Colgaba carteles, riapitá

La amenaza fantasma. Búscate un hombre que te quiera, no que me quiera a mí, o que te quiera a ti. Aquí, amenazando. Aquí delante mismo. Vamos a ver cómo explicamos el día de hoy. Tema crema para la cara. No llevo crema para la cara y me estoy poniendo como el desto. Pero colorado y chungo de la cara. ¿Quieres nivea? No. Estoy aquí con los colegas y toda la movida y no quiero ponerme crema en la cara porque como comprenderás estoy luchando por la clase trabajadora y no estoy por ponerme crema en la cara, que no es de freedom fighter. Va. Empecemos. La historia comienza por el barrio Llatí. Un sol, de mil demonios. Pero sol, sol. Como hace mucho sol, me doy una vuelta buscando las sombras por el barrio. Doy la vuelta a la manzana. Quiere un papelito, vol un paperet. Indistintamente en dos idiomas. Hoy esto no va a ser tan gracioso como ayer, porque todos los días no está uno como un cascabelito. Todos los días, no. Doy la vuelta a la manzana y en los bares del latino me miran como si fuera un expedicionario británico de excursión por Bhután. Extranjero. No me llames extranjero, que yo he nacido andaluz. Y todo el que nace en el Sur, tiene el nosequé en el cuerpo que no lo sabes ni tú. Eso, naturalmente no sale en la letra, pero va por ahí. En el primer bar, división de opiniones, en el segundo bar, en el de la bandera del toro y las bufandas del Betis y el Sevilla. Iba yo a hacer alguna broma con el tema de Sevilla y tal y no me han mirado siquiera. En fin. Territorio hostil. Y mira que yo soy del betis y del sevilla. Pero a tope. Bueno, que me desvío. Que ha sido todo muy bonito y hemos repartido globos y otros esta tarde habrán repartido chocolate y será todo maravilloso con la vieja política de los chocolates y las movidas. Nuestros globos no llevan ni logo. Escuchar inglés en la plaza de la Vila. Amigo, qué cosa. Sigo. Chocolatada, comida popular, la vieja política, los círculos, tenemos miles de personas en internet que... chocolate. Fantástico. Es lo que tiene imitar. Nosotros nos hemos quedado cortos, copón. Más morro le hubiéramos echado. Como hoy la cosa iba larga, en clase he decidido hacer un cuestionario sobre spots electorales. El nuestro, bien. El de Som, aburre. El de Psc del dron, cansa. He dicho lo de Kansas City y lo han pillado y se han reído y todo es maravilloso. Público difícil. Nos dicen que todos los anuncios electorales se parecen, que todos dicen más o menos lo mismo. Hemos visto uno de la Cup de Mataró y han flipado. Que vaya chusco, que para ser de la Cup... en fin. Les ha molado el del Collboni, pero no el del runrún, a la que le ha gustado el del runrún es porque no conocía a Ada. Y el Ardor. El de Ciutadans, ni se lo han mirado. Bueno, pues eso. Que hacer vídeos así en plan, hoy estamos con la educación pues no le interesa a nadie, y que se han aburrido dos veces en dos minutos. Caramba. A casa otra vez. No, a casa no, a encartelar. Encartelar. Si quieres saber quién trae el agua, derrámala. Compañeros, qué tal, por aquí pegando, venga. Que tranquilos, que no pasa nada, que estamos dando una vuelta. Pero que ahora volvemos que tenemos que mirar una cosa. Compañeros. Gracias. Venga. En fin, Que ha habido riesgo de morir. Ya está. Que no hace falta que me digáis nada, que ya lo sé yo. Que no sé colgar, que no sé encolar, que no sé ni pegar un sello y me dejáis coger una escoba. No miréis los pirulís de l'alternativa y tomároslo con humor.
Y bueno. Que hoy ya está bien todo. Aquí, amenazando el Ajuntament desde el... bah, no digamos desde donde, que la gente es muy susceptible.
Mañana a ver qué nos inventamos. Ah, el tema. Que si hay encuestas. Que si hay cosas así como para... que si estamos desinflados o estamos inflados. Que si el descapotable de Som, que si... yo que sé. Tenemos chapas. Si queréis. Chapas guapas. En la carpa. Mañana en Vilaseca y Enamorats, esté eso donde esté.
Ah, sí, que los vídeos largos es de poco dinero, que los caros son los cortos. Por saberlo.

lunes, 11 de mayo de 2015

Campaña electoral. Días 1, 2, 3 y 4.

¿Se acuerdan de este blog? ¿Se acuerdan de cuando yo escribía en este blog? ¿Se acuerdan de cuando yo tenía un blog que no decía nada especial pero que actualizaba cada día y que...? ¿Se acuerdan? ¿De este blog? Hiciera frío, calor, lluvia, estuviera fuera o dentro, daba igual. Yo actualizaba y escribía en este blog. Cada día de una cosa, o de la misma. Daba igual. ¿Se acuerdan?
Campaña electoral. Tu primer viaje, tus primeros aplausos, tu primera condena a muerte... esta canción la cantaba yo cuando iba al bar rey y con los colegas hacíamos el payaso. Tanto. Tanto hacíamos el payaso. Ahora voy y soy un candidato. Estoy en las listas y hago campaña electoral. Una cosa no es nosequé con la otra. He perdido mucha práctica escribiendo, llevo desde el jueves sin hacer lo que solía hacer. No me salen las palabras. The words get stuck in my throat. Contestar con canciones. Eso molaría. Hablar solo con las letras de las canciones. Eso estaría de narices. De hecho creo que ya lo hago. Hola. Soy una pistola. Vamos a hacer una cosa, vamos a empezar a contar más o menos lo que ha ido pasando estos días de campaña y así mato el deseo de escribir algo.
Primer día, primera noche mejor dicho, colgada de carteles, descolgada de carteles, carteles con la cara de la Sevilla, carteles con los del Río. El niño de la... el Ian Dury de los carteles de L'Alternativa. Qué oportunidad perdida de dar el salto a la fama, compañeros, qué mal. Qué daño. ¿Porqué me dejáis salir en las fotos? ¿Porqué no salieron sólo los cinco primeros? No, no, que salgan ocho. El ocho. El de la postura rara. ¿Qué le pasa a ese de la esquina? ¿Qué hace? Nada. Otra oportunidad perdida. De nuevo. A puerta vacía. Que no costaba nada quedarse quieto, normal. Salir en la foto. Va, venga, no pasa nada. Se descubre el cartel, oh, oh, qué guapa, madre del amor hermoso. Pero guapa guapa. Pero salgo muy seria, pero sales muy guapa. Esta es la pelea durante estos cuatro días. Salgo muy seria, sales muy seria, sales muy guapa, sales como tú eres sin reirte con la boca llena de dientes, pues eso. Pero es que reír por reír, pues para qué. O no salir en la foto y que salga toda la tropa y más tropa que no viene a cuento, pero que sale porque somos todos la tropa y nos llevamos de narices en esta foto. Bueno. Riéndonos. Salimos a colgar carteles la primera noche. Colgamos carteles un primer destacamento. De narices. En nuestra cara los de Ciu nos tapan unos pocos. De buen rollo. Nosotros somos unos seres angelicales, buenos de una naturaleza buena que la virgen qué buenos somos y no tapamos ningún cartel de nadie, porque los que tapamos con casi de los nuestros y... es que somos muy graciosos. Ese es nuestro valor añadido. Nuestra candidatura es la candidatura de la gente graciosa. De izquierdas. Y graciosa. Principalmente porque estoy yo, que soy un gracioso pero gracioso. De los que hacen reír mucho. Hago reir tanto que se ríen en los carteles de los demás. Rebajas en Hipercor. Me he leído el blog de elgelidotolya y me estoy partiendo la caja con los colegas en el cartel. Rebajas en Mayoral. Qué risa. A las dos de la mañana volvemos a casa y por la plaza de la Vila vemos el primer cartel ya en el suelo. Lo volvemos a pegar. A dormir. Al día siguiente, a la carpa. Que no haya un segundo de descanso ya nunca más, por favor. No recuerdo el viernes por la mañana. No recuerdo nada del viernes. Sólo recuerdo que por la tarde hubo un acto muy guapo, que nos salió todo de narices, que vino el Mena, el Herrera, que el Xavi y la Alex hablaron como dioses del Senado Romano o algo así como de otro tiempo y que luego nos fuimos a cenar con los compas a las Tres Hermanas que ponen unos pinchos muy buenos. Y yo también sé hacer crítica gastronómica y hablar de sitios guapos. Gente guapa. En los carteles. Todos sois icveuia, los carteles andan llenos de icveuia. Contamos los que han sido de la coali, los que han sido de la cjc, del psuc, etc. y nos salen por lo menos dos candidaturas. Para no contar una mierda, no veas si estamos solicitados. Gente guapa haciendo cosas molonas. A veces vemos carteles que nos parecen un fake. Vemos ya el sábado, mientras vamos el comando 'pausa' a poner plafones con la cara de la Alex, el bus del pp de Badalona con el lema Limpiando Badalona. Parece un fake. Parece mentira. Cuando ví el cartel del partido mayoritario con la tropa partiéndose y tal, pensé que también era un fake. Pero no. Era real. Nosotros somos los socialistas. Gente guapa, marcando, de buen sonreír, con buen tipo, pelazos, riéndose, viviendo la vida, disfrutando del Estado del Bienestar, disfrutando de lo bueno y sano que tiene estar juntos, porque somos amigos y lo estamos pasando muy bien aquí. Gracias a la vida, que me ha dado tanto. Estoy muy contento, de que me hayas invitado, a pasar la tarde a tu casa. Dame la mano, hermano, americano. Contestando con canciones. Qué risa. Pero no siempre hay risas en la casa de la felicidad. Hay una trastienda en la que se cocina todo. Entre bocatas. Entre palmas y alegría, cantaban los Iron Maiden. Seguimos adelante. Sábado a mediodía, poniendo carteles. Yo también soy socialista. Lo sabe todo el mundo. Yo soy un socialdemócrata convencido. Y os lo demuestro cuando queráis. Número ocho, socialista. Ponerlo así. Nosotros somos los socialistas. Nosotros somos los zíngaros. Enamorado de Varsovia. Brillan los fusiles. El sábado por la tarde vamos a comer con la Estefi. Tremenda mujer. Nosotros somos los socialistas. Nosotros somos Ada Colau. Lo introduzco aquí como tema de campaña. Si quieres votar Ada Colau, es decir, hacer como si votases a los de la Ada Colau en Barcelona que están ahí ahí para ganar, tienes que votar aquí a esta pobre gente de la gentdesquerres de icveuiagramenet. Eso es así. Los demás, no son nosotros. Los demás, no son Ada Colau. Miren las papeletas. Lo pone. De verdad. Fíjense. Hemos metido otro gol. Gol de Señor. Un abrazo compañeros, gracias por la difusión. Pablo Iglesias, fundador. Nosotros también somos los socialistas. Estoy en vena. Soy el gracioso de las listas. El único e incomparable payaso fofó de las listas.
Sábado por la tarde, los políticos hacemos cola en la Nit de las Tapas. Noche de las Tapas. Un éxito, la verdad. Pero en la calle hace frío y yo me he levantado a las quinientas y he estado llevando la escalera por Santa Coloma del Monomé y me pesa hasta el alma. Circunvalación, Alameda, el copón y los apóstoles. Uf. Domingo. Diada de l'Ensenyament. La compañera Larroya lee el discurso, hay que ir a saludar. Estamos en campaña, copón. Que se note. En Santa Coloma, no en Sabadell, aquí. Qué alegría me dijeron, vamos a la casa del Señor. Vamos a ver cómo los niños se ponen perdidos de pintura. Vamos a ver el halo en el cielo. Ostia, la foto del halo en el cielo. Espera a ver. No la tengo. -Creo que me he fumigado todas las fotos del whatsapp. Eso que tiene no querer hacer una cosa por si la haces y pasa. Y pasa.
¿Dónde iba? Por el domingo. Muy cansado. Muy cansado. Muy cansado para discutir, para hablar, no tengo ganas de nada, porque yo de verdad os lo digo amigos y hermanos en Cristo, que no soy una persona de hablar ni de discutir. De verdad. Me conoce la gente y sabe que no soy de meterme en nada ni de hablar mucho y que el secreto de mi éxito es simplemente el saber estar. Eso. Saber estar. Una persona con sus buenas tardes, sus buenos días, su qué tal y qué me cuentas y te escucho y si me preguntas yo te digo que de puta madre todo, nen, que esto va viento en popa. De verdad. Compañero. Pero así te lo digo. Qué tarde noche, amigos. Qué confesiones. Qué revelaciones. Qué rovellones. Qué pasa por la calle. Nada, no pasa ná. Yo también he sido un ser humano de izquierdas. Yo, antes de ser socialista, fui como vosotros y tuve posters de Kortatu en casa. Y... pero ya no. Porque soy una persona que evoluciona. Y mañana aquí y pasado muriéndome de risa en un cartel, en plan, me lo estoy pasando tan de puta madre aquí en el anuncio del plan de pensiones del Banco de Bilbao que... la virgen. Para casa molestando y lo noto y pido perdón y ya me voy, compañero brigadista internacional, compañero, me voy. Si no aguantas una broma, de verdad, qué cara. Qué sueño, padre. Porque hoy ha sido de nariz colorada, de carpa, de mercado, de ir a repartir, de sonreír, de reír, de ir a una entrevista con dos periodistas incisivas y muy apañadas, y que lo diga yo tiene mérito, que sé reconocer a los buenos profesionales cuando... soy la ostia, de verdad. Los socialistas tienen bolsas. Los socialistas tienen globos. Nosotros tenemos unos globos verdes en los que no pone nada. Nos sobra la leyenda y el logo y todo. Verde. Y ya sabéis vosotros qué. El verde. Yo. El verde. Yo. El verde. Yo. Josep Ramon Aragó. Soy... de verdad, que si me conociérais mejor, necesitaríamos un día de unas 55 horas o así para dar a basto. Soy genial. Mira qué brazo tengo. Nada, no tengo brazo ni tengo nada. Entrevistaza, un nuevo éxito del equipo de la gentdesquerres que estamos que lo petamos. Pero petarlo de verdad.
Oye, en serio. Que estamos ahí pero al límite. Mañana vamos al Llatí y a la Guinardera y luego...
Esto es el no parar. Amigo. No dejes de hablarme, te necesito. Keith Moon se encuentra con John Lennon en una fiesta y Lennon es tan molón. Joder.
Mañana más.

jueves, 7 de mayo de 2015

El entusiasmo y el servicio

Remarcable testimonio del que fuera emperador de Fresitia, Frenando III el Entusiasta, sobre cómo percibimos qué y, si lo hacemos, cómo y cuánto. El texto está incluido en las memorias del mismo emperador, tituladas 'Crónica de la peripecia de una persona que hizo lo que pudo'.
'Decir que fue por iniciativa personal, sería mentir y servidor no puede mentir porque a ojos de Dios, lo último que puede hacer una persona de bien es decir mentiras y engañar. Engañar y no decir quién es uno o a quien sirve. Yo sirvo a Dios. Sería injusto decir que sirvo a Dios si no lo hiciera, pero no es cierto. Sirvo a Dios. Otros no pueden decirlo. Yo sí. Últimamente estoy muy sensible con este dilema del servicio. Me hago mayor y en el fin de mis días mi cabeza se ocupa de asuntos que no tienen pies ni cabeza, quizás. A quién servir. Porqué servir a alguien a quien no crees. Servir una idea que no es la tuya. Yo, por ejemplo, y sin querer parecer pretencioso ni nada de eso, siempre serví a Dios. Lo tuve claro y claro lo tengo todavía. Sirvo a Dios. Otros, diciendo servir a Dios, en realidad servían a otros ideales y no digo que no fueran legítimos, pero no eran los que decían servir o los que su corazón anhelase realmente. Servir a una patria, a una nación, con el corazón en la mano, no digo que no sea algo loable y juicioso, pero esconder ese amor y a esa patria en pos de un beneficio material que no tiene que ver tanto con el... envejezco y mi senectud se nota en que hablo y hablo, de manera totalmente despreocupada y sin tener en cuenta si se me escucha o no. Proseguiré con mi relato, que creo que iba diciendo que mis ejércitos acababan de conquistar la ciudad de Turgentia y debatíamos, mi estado mayor y yo, si proseguir con la campaña o bien retirarnos y esperar a que el invierno pasara. Yo, que todavía no era conocido como El entusiasta, quizás impulsado por las ganas de agradar a una mujer importante que mucho me inspiraba y que no era otra que mi santa madre, decidí seguir hacia delante. Y así, en una serie de ataques con cierto aire de desesperación por hacer y destruir a la vez (si algún corrector de textos puede hacer algo con esta frase última frase, doy mi imperial permiso para que la modifique), terminamos de hacernos con el reino vecino de Kiwia. Y de Kiwia, sin que nos diera ni un poco de pereza, pasamos a Orangia. Y de Orangia a Peria. Y antes de que llegase la primavera, con sus flores y su buen tiempo, ya estábamos en posesión de toda una serie de reinos y principados que nos aseguraban riqueza y sustento. Bien satisfechos con el trabajo realizado, y con la conciencia de haber servido a Dios en todo momento, dado que esos reinos estaban ocupados por infieles que o no servían a Dios o a mi imperial parecer no lo servían como debieran, nos dirigimos de nuevo a nuestra capital Palombia a disfrutar de las mieles del triunfo. Allí me recibió mi santa madre, en palacio, en una ceremonia austera que me hizo sospechar algo. Mi madre, mi santa madre, me saludó, hizo una reverencia ante una sala llena de nobles, embajadores, representantes de los países vencidos, naciones lejanas que enviaron... me saludó y me dijo 'algo te pasa, que haces las cosas por hacerlas, como por encargo, algo te pasa'. Y a una madre no se la puede engañar.'

miércoles, 6 de mayo de 2015

El profesor de Ciencia Política y Comunicación Política por la Universidad de Grünefreund, Nadio Teins, analiza el segundo debate televisivo entre Cabezas de Lista a las elecciones municipales del 24 de mayo de este mismo año

Se aficiona uno a cada cosa... bueno, que como estoy que no paro y si eso otro día os cuento que de verdad que llevo una vida que ya la quisiera para sí... bueno, que no sé. No me puedo concentrar ni para escribir un par de líneas. Que he vuelto a coger la crónica del debate televisivo que el profesor de Ciencia Política y Comunicación Política por la Universidad de Grünefreund, Nadio Teins ha realizado para 'El Mercurio de Safaretjos'. Este me lo he leído entero y la verdad es que los diarios locales tienen un valor tremendo a la hora de ir a buscar a gente para escribir. En fin.
'Quisiera comenzar, bueno, de hecho voy a comenzar, recordando unas palabras de mi buen amigo, el profesor de la Universidad de Moiño, Xosé Pedrito Barrantes, en torno al carácter de los gallegos, que puede que no vengan muy a cuento, pero que ayer me saltaron al rostro como si fueran agua fresca del avellano. Dice así mi buen amigo Barrantes 'los gallegos somos personas que somos difíciles de encuadrar dentro de un ámbito concreto'. Yo estoy muy de acuerdo con esto y diría más, pero no es este el sentido del texto, ya que hoy tengo un encargo y este encargo no lo voy a cumplir. Digo lo siguiente. El director del Mercurio solicitó de mí una opinión favorable a la candidata de la formación filocomunista Gente de la Izquierda. Yo, incorruptible y totalmente ajeno, como saben, al universo femenino que me impide de todas todas manifestarme en torno a lo que mujer o fémina diga o piense, me negué en redondo a someterme a las peticiones del director. No y mil veces no, dije. Lo tengo grabado. Y con este firme propósito vi ayer el debate. Sí que he de decir que, por seguir creciendo como profesional y como persona, he consultado revistas y publicaciones, incluso varios libros en los que se analiza la psicología femenina, con tal de poder, al menos, dar otra visión del asunto que nos concierne. Insisto, nada más lejos que someterme a presiones ni a componendas. Lo hago y lo haré siempre que el saber y el anhelo de más conocimiento me alcance. Y nada más. El debate de ayer giraba en torno a dos temas bien complejos pero de fácil resumen: urbanismo y educación. Cambios. El moderador ya no era el mismo, que lo sustituyó una joven profesional de la comunicación que mostraba ademanes pausados, calmosa actitud y una manifiesta predisposición al laissez faire, que la honraba. En ocasiones, su presencia parecía que no fuera necesaria, lo que es lo mejor que se puede decir de un árbitro. No entraré, como ya se imaginarán en consideracines programáticas. Y no puedo, porque me veo en la necesidad de abrir mi corazón. Enamorado estoy. Perdidamente. Mi buen amigo, el doctor en ciencias de la Salud por la Universidad de Nebrija Facundo Cundemann siempre tiene a bien recordar unas palabras del poeta Desidio que decía 'el amor sabes cuando llega y a veces llega y tú no quieres y es así'. Sevilla. El acento sevillano, el deje andaluz, me turba desde que yo hiciera en tiempos remotos unos retiros espirituales en la Alpujarra granadina, y la candidata que no sé ahora si es filocomunista o de izquierdas o patrona de la virgen de... me da lo mismo, me enamoró con su arte y salero andaluz, con sus palabras graciosas y su donaire herencia de lo moruno y gitano. Es por eso que hoy vengo a verte, sevillista seré hasta la muerte. La giralda se pone orgullosa de ver a su Sevilla en el Sánchez Pizjuan. Palabras que me salen del corazón, palabras que son sinceras. Palabras que no tienen que ver más que con el sentimiento que me produce escuchar a una persona entonar con ese gracejo andaluz lo que quiera que dijera. ¿Qué dijo? No lo sé. Se me enturbió el espíritu y se me nubló el entendimiento. Todo al garete. Del resto de intervenciones, datos, malas caras, gesto contrahecho, personas que se van encogiendo a medida que va avanzando el debate, personas que tienen un discurso muy bien escrito pero muy mal interpretado. Tan sólo quisiera hacer una consideración sobre la no presencia de los cabezas de lista, hecho que no interfiere de ninguna manera en mi crónica, pero que me da que pensar sobre la pertinencia de los procesos de elección de cabezas de lista. Es decir. ¿Sirve para algo un proceso de elección de un representante si luego ese representante no va a aparecer cuando se le demanda porque tiene otro compomiso? Considero que no. Ya que los valerosos representantes de las formaciones que no enviaron a sus cabezas de cartel, hicieron un gran papel, papel. Papel. Escrito en el papel quedan los recuerdos de una noche en la que Andalucía entera se encarnó en las palabras de una candidata joven y de ecosocialistas modos. Andalucía en su verbo, Andalucía en su donaire. Andalucía. Ejemplo de sevillanía. Ole ole, betis ole. Insisto. Poca cosa más. Galicia, gente diversa. O muy moderna y muy capaz o bien 'familias no nacionales', concepto peliagudo ya que yo no soy de aquí directamente y me siento aludido, aunque como me lavo regularmente, debo estar a salvo de... quién sabe. Por lo demás, datos, proyectos, zonas de aparcamiento, una radio que nadie supo a qué venía, la palabra mierda que aparece por primera vez en un debate, trilinguismo, datos, rogativas a la Unión Europea, solicitudes de ayudas en base a proyectos que 'no hace falta que nos pongamos tan así que esto es sólo para pedir pasta joder, que os ponéis como motos y no tenéis ni puta idea, ostia ya', miradas al tendido para comprobar si la faena ha tenido éxito, papel, el papel, bueno, ehm, bueno, ehm, los sustitutos de los sustitutos, caras largas, caras tristes, encogimiento. Y Sevilla. Qué arte. Qué buen jamón el de Huelva y qué gracia hablando los de Cádiz. El mar, la rumba, ole betis ole. No sé. Se me confunde todo en la memoria y no sé cómo he de concluir este relato que he iniciado recordando que Galicia tiene de todo también. Del resto, no sabría qué decir. Datos y la sensación de que el tercer debate sí que sí que no me lo pienso perder porque yo quiero escuchar más ese acento andaluz de la candidata de la izquierda sevillana y comprobar hasta qué punto desconozco más datos lanzados como si fueran latigazos que fuertemente se clavan en mi espalda. Qué recuerdos. Espero señor director que este texto responda de alguna manera a sus reclamos, muy agradecido quedo de usted y le rogaría que un polo de la talla S quizás me vendría también muy bien.'

lunes, 4 de mayo de 2015

Felices 140 - Gracia Querejeta

Hacer una película no debe ser fácil. Yo no he hecho nunca ninguna película y creo que no haré ninguna jamás y por eso respeto mucho a la gente que hace películas. Ahora bien, una cosa no quita la otra. La otra es que cuando una película está mal, pues se dice y punto. Hacía mucho, pero mucho, que no iba al cine y finalmente me decidí por Felices 140 porque vi el trailer en las noticias, que tenía buen reparto, que la historia podía estar bien. La directora era Gracia Querejeta, pero no le dí importancia. Por lo que entendí en el trailer, en la noticia de la Sexta, en las entrevistas con los actores, parecía una película divertida. Si. Eso pensé yo. Una vez que empiezo a decidirme por esta película, me miro dónde la dan y evito... pero no lo puedo evitar. Un comentario en una de las webs donde ves la cartelera me dice que 'Gracia Querejeta no da con el tono de la película'.
Gracia Querejeta es una directora especializada en películas de tono bajo, no diré triste, pero son películas a las que, a ver, no vas a echarte unas risas. Bueno. Cuando leo el comentario citado, pienso, ojo, así que es una comedia y Querejeta no ha dado en el clavo. Mmm.
Maribel Verdú es una veterinaria a la que le ha pasado algo por su cumpleaños e invita a sus amigos y familiares a una estancia en un casoplón en las Canarias. Allí los tiene. El exnovio con su nueva pareja, su hermana y el cuñado abogado listón, una pareja de amiguetes que tienen un restaurante, el sobrino de ella hijo de la hermana y el cuñado abogado listón, y un amigo ricacho que ahí está. Ya está. Llegan y uno dice, bueno, a ver cuando empieza la comedia. El tema está en que a ella le han tocado 140 millones de ebros y deja a todo el mundo picueto. Ahí va la ostia, vaya pastizal. Bueno. Pues no va a ser una comedia, esto va a ser otra cosa. ¿Qué cosa? Es en ese momento, cuando mi acompañante empieza a decir 'esta peli es rara'. O bien 'esta peli está mal'. Porque el tono falla. Es verdad. La música, las interpretaciones, pero sobre todo la música, el clima que se crea en la película es el de una película dulce, suave, de relaciones personales cotidianas y de gente común que tiene problemas pero que tira hacia delante. Algo así. Una música blanda. Orquestal y blanda. Y en la película en teoría, empiezan a pasar cosas que no son blandas, ni sosas, ni íntimas, ni nada. Es un Thriller. Como un castillo. Con su asesinato, si dinero de por medio, etc. Y la música es de Farmacia de Guardia. Es como si se hubieran equivocado en el montaje. Nadie grita además, pasan cosas y la gente no se pone excesivamente nerviosa, no hay histerias, no parece que... no sé. 'Esta peli está mal'. No hay tensión. La historia va transcurriendo, los sucesos graves no dejan de aparecer, pero todo lo que se les ocurre a los personajes es 'me voy a dar una ducha a ver si me...'. Y ya está.
Y acaba la película y tú pensabas que ibas a ver algo así como una comedia, te enfrentas a un thriller que parece una película de Garci y lo único que quieres saber al final es si los parajes naturales son de Tenerife o de otra isla. Y ya está. Sale Antonio de la Torre, y no pasa nada. Sale Eduard Fernàndez, y tampoco. Sale... vamos, que no pasa nada. El guión es de Antonio Mercero, eso ya da algo más de certidumbre las cosas y por eso lo de Farmacia de Guardia. No sé. Esa sensación de que la música no era de esta pelí y la han colocado por... no sé. Mal.
Pues vaya regreso triunfal al cine. Así no hay quien pique otra vez.