martes, 12 de marzo de 2013

Moon - Duncan Jones (Zowie Bowie)

En estos días en los que dedicamos la semana noticiosa a la ciencia ficción, averiguando si el Espíritu Santo acierta o no, vamos a comentar una película que emitió ayer la 2, suponemos que porque David Bowie ha sacado un disco. Y, pudiendo poner una película de Bowie... decidieron poner una película del hijo de Bowie. El hijo de Bowie se llama Duncan Jones. Es el director de la película. Tiene esta película y otra que se llama Código Fuente. Código fuente sí que fui a verla al cine, pero Moon no. Moon tuvo un chorro de premios en el Festival de Sitges, mejor película y mejor actor para Sam Rockwell. Pero pasé de verla. El hijo de Bowie, como decimos se llama Duncan Jones porque en principio se llamó Zowie Bowie, pero con el paso de los años, supongo que el muchacho se cansó y dijo, paso de rollos, me llamo Duncan y el apellido de mi padre de antes de que le diera la pedrada y fuera. Pero que vamos, es el hijo de Bowie. Vean fotos. Se parece. Con la cara más infladita, más regordete, pero los ojos y el sonreír lo tiene muy parecido. Es el hijo de Bowie.
Este pensamiento, 'es el hijo de Bowie', ya no se me despegó durante toda la película de la piel, de la cabecita mía. Es el hijo de Bowie, con lo que intentaba uno en cada plano relacionar lo que veía con 'algo de Bowie'. Y no. Nada. En inglés a veces se oía decir...'Spaceman John...' y decías, ajá! Spaceman... pero nada más. Y eso. Es duro ser el hijo de alguien como Bowie. Debe ser cantidad de duro. Bueno, dejemos a Duncan Jones con sus historias y pasemos a la película.
En la Luna están sacando un algo que al parecer es una fuente de energía la mar de chula y que casi, casi, se saca sola. Allí, la compañía Lunar tiene a un tío trabajando, interpretado por Sam Rockwell, que se llama Sam Bell. Sam está a dos semanas de pirarse a casa, con unas barbas y unas pintas y unos pensamientos de locazo que cuidado. En la base está acopañado por un robot, como Hal, pero que se llama Gerty y es la mar de majo y le hace Smileys para que nos imaginemos si está triste, alegre, preocupado, etc. Como hablar por el Wasa, pero con voz. La voz es del Kevin Spacey. Como uno viene de ver todas esas pelis con robots que se sublevan y se suben a la parra, se pasa todo el film diciendo 'verás como el robot la prepara', pero no. Ahí está Sam Bell, cumpliendo su tarea pero con un poquito de ida de pinza encima, cuando en una excursión a ver nosequé, se da un piño con el coche y...
¿Cuento de qué va la peli o no? ¿La cuento o no? Se da el piño con el coche y cuando se despierta se encuentra mal, claro, y está ahí renqueante, pero cuando se recupera dice... qué pasa aquí con los mensajes y tiene mal rollo porque oye hablar a Gerty con alguien y dice... voy a salir un momento. Y la máquina no le deja, pero acaba cediendo. Y sale y se encuentra con que... su cuerpo está en el coche aquel todavía.
Ojo. ¿Cuento más o no?
Pues nada, que de la forma más normal nos encontramos con que uno acepta que se ha encontrado uno a si mismo en el coche en el que se pega el piño y pone cara de preocupación pero no se caga vivo, ni se vuelve loco, no nada. Se acepta, se hace uno preguntas, qué pasa aquí, me curo a mi mismo que soy el otro, y sanseacabó. El resto de la película se lo pasan uno y el otro aceptándose y viendo a ver de qué manera solucionan el tema. Ah, porque la empresa, que ve cosas raras cuando están los dos juntos, manda a un equipo de 'investigación', para que ponga orden. Y contrarreloj tienen que apañar la situación.
La película, y aquí viene el veredicto, está muy bien. Es complicada de entender cuando uno ve a los dos a la vez pero luego la cosa se entiende perfectamente, si ellos mismos la entienden, nosotros más, y además es que el muchacho que protagoniza la peli es muy bueno. Y el robot también. El robot es más majo que las pesetas, porque quiere mucho a Sam Bell, sea Sam Bell este, aquel, o todos.
Y al final las empresas son muy malas porque utilizan a la gente como... en fin. Ya se lo imaginan.

4 comentarios:

  1. A veces la pelis de ciencia ficción tienen mucho de ciertas. Los dramas personales y la angustia vital pueden surgir en cualquier momento y el detonante suele se el miedo y la angustia.
    Un abrazo

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  2. Ya lo creo que se parece. Y tener la cara más rellenita que D.B. no es difícil si no eres yonqui.
    La veré, a ver el hijo qué tal.
    Hace no mucho vi una aberración cinematográfica sobre D.B. a finales de los 70's. Otro hace de Iggy Pop... fatalísima. Se me ha olvidado el nombre y todo.

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  3. he leido solamente hasta cuando empiezas a hablar de la peli porque no la he visto!

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  4. Monsieur, no se preocupe: sus lectores estamos ya entrenados entendiéndole a usted a veces. No será problema para nosotros.
    Bueno, entonces no le hacemos la prueba de ADN, no? No hace falta.

    Feliz día, monsieur. Yo me conformo con sobrevivir a él.

    Bisous

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