jueves, 1 de marzo de 2012

Llega Lenin



A ver. Que yo ahora me bajo del tren y me empieza a decir la gente 'Lenin, Lenin...' y yo no conozco ni a la mitad. A ver. Decirme. ¿Quiénes son? ¿Nos podemos fiar de esta gente? Ya entiendo que está todo el mundo muy contento y muy ilusionado, pero os digo una cosa. Yo llevo mucho tiempo fuera y quizás sea ya un defecto de fábrica, pero no me gusta ver a tanta gente junta. Ya. Que lo habéis organizado todo y que está todo muy controlado, pero a ver. Por ejemplo. ¿Quién es ese? ¿Ese de ahí? El del bigote. Ese es nuevo. A ese no le recuerdo yo de haberlo visto ni cuando estaba aquí, ni me habéis dicho nada de él mientras he estado fuera. Que se ha apuntado mucha gente, dices. Yo qué sé. Pero habrá que mirar luego a ver quién se ha apuntado y porqué se a apuntado. Que no sé. Ese del bigote. Es que lo miro y digo... a ver, ese del bigote no puede ser de los míos. Es algo, que yo que sé. He pasado mucho tiempo fuera y a mi rollo y claro, ahora me cuesta empatizar. Mira, por ejemplo. Aquel, aquel otro, el de las gafitas redondas. Ese que grita tanto. El que grita mucho... algo tiene que disimular. Demasiado seguro de si mismo. Yo que sé. Que no es que tenga miedo de bajarme del tren, pero a ver. Que la cosa no me parece muy segura. Otro. El que está sujetando la pancarta. Ese de ahí. ¿Porqué se ríe tanto? Yo no le veo la gracia. Que está contento. Lo que tendría que estar es acojonado. Porque yo estoy acojonado y en cuanto me baje del tren la vamos a liar parda, así que no sé de qué se ríe. No sé. Que no me quiero meter en lo que habéis hecho vosotros aquí, que ya veo que lo tenéis todo muy controladito, pero mira, ya tiene uno una edad y no quiero más sustos. Así que si me bajo del tren no quiero volver a subirme nunca más. Me gustaría que quedara claro. Y la verdad, podríamos haber montado algo en un sitio más pequeño. Que no quiero decir que no sea buena idea esta de montar pajarracas, pero no sé. Que se nos puede colar cualquiera. Que ya sé que lo tenéis todo controlado y no me miréis con esa cara, pero entendedme. Y otra cosa. ¿Esta gente sabe de verdad quién soy yo? No sé. Es que la verdad, me parece extraño que toda esta gente esté aquí esperándome a mi, que llevo mil siglos fuera. No sé. Tan popular no soy, creo. ¿No habréis montado esto para...? Vale, vale, ya lo dejo. Ya me bajo del tren. A ver sujétame que sólo me faltaba ahora resbalarme y para qué. Cuidado. Mira el del bigote cómo me mira.

4 comentarios:

  1. con lo de "el del bigote" se refiere a usted?
    Yo en su lugar volvía a subirme al tren y desaparecía, que no están los tiempos como para dar la cara. Te la parten por nada. Si es que mire que somos.

    Feliz día, monsieur

    Bisous

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  2. Camarada Tolya, ¡feliz fin de semana!

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  3. Ay el del bigote, que te falsea el testamento, ojo, que ya se ve a venir que no te fias. A mi me da que el de las gafitas redondas, con sus cosas, era más de fiar, pero ahí estábamos los catalanes para joderla. Bueno, ya estaba todo jodido por entonces. Y aquí Andreu Nin.

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    Respuestas
    1. aquí teníamos de todo, de ramon mercader a andreu nin. no sé yo si el de las gafitas a malas hubiera resultado muy distinto o es que el del bigote no tenía más luces. no sé.

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